El presidente ucraniano, Volodimir Zelensky, rechazó este fin de semana la oferta de mediación presentada por una delegación de mandatarios africanos y lo consideró un "engaño" de Moscú coincidiendo con la contraofensiva lanzada por las tropas de Kiev.
"Autorizar cualquier tipo de negociación con Rusia, cuando el ocupante está en nuestra tierra, equivaldría a congelar la guerra, congelar el dolor y el sufrimiento", declaró el jefe de Estado ucraniano en una conferencia de prensa conjunta con los dirigentes africanos en Kiev. "Está claro que Rusia intenta nuevamente utilizar su vieja táctica del engaño. Pero Rusia no conseguirá engañar más al mundo. No le daremos una segunda oportunidad", agregó.
La propuesta de mediación coincide con el lanzamiento de la contraofensiva de las tropas ucranianas para intentar recuperar las zonas ocupadas por Rusia desde su invasión en febrero de 2022. El ministerio ucraniano de Defensa dijo que el ejército se topaba con la superioridad aérea y la potencia de fuego rusa, pero obtenía "éxitos tácticos en el sur". Desde San Petersburgo, el presidente ruso Vladimir Putin estimó que esta contraofensiva no tenía "ninguna posibilidad" y no estaba alcanzando ninguno de sus objetivos.
La guerra en Ucrania golpeó duramente a África, al afectar el suministro de granos ucranianos y de fertilizantes rusos. Por eso, la delegación de ese continente, encabezada por el presidente de Sudáfrica, Cyril Ramaphosa, tiene especial interés en que el conflicto se termine. Los enviados se reunieron el viernes con Zelensky en Kiev y este sábado ya llegaron a Rusia para hacer lo mismo con Putin en San Petersburgo.
"Debe haber una desescalada de ambas partes", declaró Ramaphosa. Además del presidente sudafricano, la comitiva está integrada por el presidente senegalés, Macky Sall; el de Zambia, Hakainde Hichilema; y representantes congoleses, ugandeses y egipcios.
Los países africanos denunciaron de forma menos unánime que las potencias occidentales la invasión rusa. Por otra parte, Putin intenta atraer a los dirigentes africanos, argumentando que Rusia combate el imperialismo occidental. "El sistema internacional neocolonial (...) dejó de existir y el mundo multipolar, al contrario, se refuerza", afirmó.
Poco después de la llegada de la delegación africana, la capital ucraniana fue blanco de un ataque ruso. El ejército del aire ucraniano indicó que derribó doce proyectiles, entre ellos seis Kinzhal supersónicos, interceptados cerca de Kiev. Los misiles rusos son un mensaje a África: Rusia quiere más guerra, no la paz", reaccionó en Twitter el ministro ucraniano de Relaciones Exteriores, Dmytro Kuleba.
La reacción a estos ataques rusos también llegó desde Europa. Peter Stano, portavoz del jefe de la diplomacia europea Josep Borell, señaló que los dirigentes africanos fueron "acogidos de una manera muy especial con nuevos ataques de misiles".
Con información de Télam