El asesor en política exterior y excanciller brasileño Celso Amorim, llegó ayer a Kiev como enviado del presidente Luiz Inácio Lula da Silva, fue recibido este miércoles por el diplomático ucraniano Andrij Melnik, quien le expresó su confianza en que Brasil "desempeñe un papel importante" para detener la guerra. "Quiero que me traiga indicios de soluciones para que podamos empezar a hablar sobre paz. Ya sabemos lo que quiere (Vladimir) Putin, ahora vamos a saber lo que quiere Zelensky y ahí vamos a tener instrumentos para hablar con otros países y parar esta guerra", dijo el presidente de Brasil, Luiz Inácio Lula da Silva, en conferencia de prensa. Está previsto que Amorim sea recibido por el mandatario, Volodimir Zelenky, este jueves.
Amorim ya visitó Moscú en abril, donde se reunió con el presidente Putin, como parte del plan del Gobierno de Lula de hacer de Brasil un intermediario en este conflicto en el marco de una solución que no pase por seguir armando a Ucrania, como lo hacen la Unión Europea y los países de la Organización del Tratado del Atlántico Norte (OTAN).
"Brasil puede desempeñar un papel importante para detener la agresión rusa y alcanzar una justa y duradera paz", dijo Melnikm, la primera de las autoridades ucranianas con las que Amorim se reunió antes de verse con el presidente Zelenski, a quien presentará el plan de paz de Brasil, informó la agencia de noticias Europa Press. "Feliz de conocer al asesor jefe del presidente brasileño Lula da Silva", escribió en su cuenta de Facebook el diplomático ucraniano, hasta hace poco embajador de Ucrania en Berlín, en un mensaje que acompaña con una fotografía del encuentro.
El viaje del brasilero a Kiev, anunciado a fines de abril, busca aminorar los cuestionamientos que recibió el Gobierno brasileño por los aliados occidentales de Ucrania y que consideran que son guiños a Rusia. En esa línea, Amorim recibirá las demandas y principales exigencias del presidente Zelenski para que el Gobierno de Brasil pueda idear un plan de actuación que permita comenzar negociaciones entre las dos partes.
Por su parte, Lula da Silva afirmó desde Brasilia, tras reunirse con el primer ministro neerlandés, Mark Rutte, que confía en que Amorim, a quien calificó como "uno de los diplomáticos más experimentados del mundo", regrese con "buenas noticias" tras verse con Zelenski en Kiev. Este martes, el mandatario brasileño dijo que su país quiere comportarse con "equilibrio" en la guerra de Ucrania contra Rusia para intentar detener el conflicto.
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"Brasil y otros países tienen razones para mantenerse en una posición de equilibrio, Ucrania tiene que resistir, la Unión Europea tiene sus razones también", dijo Lula, que había sido criticado por no haber enviado a sus diplomáticos a Ucrania luego de que visitaran en marzo pasado Moscú. El canciller ruso, Serguei Lavrov, estuvo a fines de abril en Brasilia escuchando la iniciativa brasileña, en el marco de una gira latinoamericana.
Lula aseguró que pretende presentar su plan para crear un "club de paz" durante la participación el 21 de mayo próximo de la reunión del G7, el grupo de países aliados más desarrollados, en la cumbre de Hiroshima, Japón, a la que fue invitado por séptima vez en la historia del país. Agregó que ya conversó sobre la necesidad de un cese del fuego con Estados Unidos, la Unión Europea, Rusia y China.
Con información de Télam