Rusia condicionó este martes la apertura de un negociación de paz a que Ucrania ceda los territorios ucranianos que fueron ocupados por las tropas rusas y luego anexados en octubre pasado.Sin embargo, el Gobierno ucraniano ya ha dicho que no reconocerá la ocupación o anexión de cuatro regiones en el sur y este del país.
"La parte ucraniana debe tener en cuenta las realidades (...) en el terreno", declaró el vocero de la Presidencia rusa, Dmitri Peskov, en su conferencia de prensa diaria. "Esas realidades son que la Federación de Rusia tiene nuevos sujetos a raíz de los referendos que tuvieron lugar en los territorios" ucranianos anexados de Donetsk, Lugansk, en el este, y de Zaporiyia y Jerson, en el sur, dijo Peskov.
El vocero del presidente Vladimir Putin dijo que era "imposible cualquier avance" diplomático hasta que Kiev no "tenga en cuenta esas realidades", informó la agencia de noticias AFP.
En octubre, Rusia se anexionó de cuatro regiones ucranianas, además de Crimea -que se anexionó en 2014-, pese a no controlarlas totalmente. La decisión es mayoritariamente rechazada por la comunidad internacional y por Ucrania, que reclama que Rusia retire su ejército y entregue todos los territorios que ocupa.
Las declaraciones de Peskov llegan un día después de que el presidente ucraniano, Volodimir Zelensky, propusiera hacer una "cumbre de paz global", durante un discurso por videoconferencia ante los países del G7. En su alocución, el mandatario ucraniano llamó a Rusia a retirar las tropas antes de la Navidad, un tiempo de "paz y no agresión".
"Sería correcto que esta Navidad comenzara con la retirada de las tropas rusas del territorio internacionalmente reconocido como Ucrania", dijo Zelensky, quien aseguró que con este paso Moscú "garantizará el cese fiable de las hostilidades".
Rusia invadió Ucrania en febrero pasado y conquistó territorios en la frontera entre ambos países. En los últimos meses, el Ejército ucraniano logró hacer retroceder a las tropas del Kremlin, a lo que Moscú respondió con la movilización de 300.000 reservistas para consolidar las lineas de defensa y el ataque a las infraestructuras energéticas del país.
Con información de Télam
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