El papa Francisco comenzó a llorar este jueves al mencionar el sufrimiento de los ucranianos durante una oración tradicional en la Plaza de España de Roma. La voz del Sumo Pontífice comenzó a temblar cuando mencionó a los ucranianos y tuvo que detenerse, incapaz de hablar, durante unos 30 segundos mientras le temblaba la cabeza. Cuando reanudó la oración, su voz se quebró.
"Virgen Inmaculada, me hubiera gustado hoy traerte la acción de gracias del pueblo ucraniano por la paz que desde hace tiempo venimos pidiendo al Señor. Pero todavía tengo que presentarte el ruego de niños, de ancianos, de padres y madres, de jóvenes de esa tierra martirizada que sufre tanto", planteó el pontífice con la voz entrecortada al rezar frente el famoso monumento de la Plaza de España de la Inmaculada Concepción de la Virgen.
A metros de las famosas escalinatas del centro de la "Ciudad Eterna", y tras dos años de visitar el lugar en soledad a causa de la pandemia, el Papa cruzó Roma para rezar primero en la Basílica de Santa María la Mayor, en la zona de la estación Termini, y luego hacer la visita tradicional al monumento emplazado frente a la embajada de España ante la Santa Sede, la representación diplomática más antigua del mundo, de 400 años.
"Hoy vuelvo a ti junto con el pueblo de esta Iglesia y de esta Ciudad. Y te traigo gracias y súplicas de todos tus hijos, de cerca y de lejos", dijo el Papa frente al monumento rodeado por miles de turistas que llenaron la zona en un día feriado en Italia.
El pontífice no se olvidó de mencionar "las preocupaciones de las familias, de padres y madres que a menudo luchan para llegar a fin de mes en casa, y enfrentan el día a día pequeños y grandes retos para seguir adelante".
Con información de Reuters y Télam