Bombardeos "potentes" alcanzaron nuevamente una central nuclear Zaporiyia, del sur de Ucrania controlada por el Ejército ruso. El director del Organismo Internacional de Energía Atómica (OIEA) de la ONU, el argentino Rafael Grossi, calificó el hecho de "extremadamente preocupante" y llamó al “cese inmediato” luego de que ambos países se acusaran otra vez de los ataques.
"Esta noticia es extremadamente preocupante; se produjeron potentes explosiones en el sitio de esta importante central nuclear, lo que es completamente inaceptable", dijo Grossi. Horas después, sostuvo ante la televisora francesa BFMTV que la central de Zaporiyia había sido objeto de “una buena docena de ataques”, a su juicio “absolutamente deliberados y selectivos”, aunque declinó atribuir la responsabilidad a las tropas rusas o ucranianas.
El diplomático se manifestó indignado por el hecho de que algunos “consideren que una central nuclear es un objetivo militar legítimo” y consideró que los ataques constituyen una situación “extremadamente grave”.
“La planta está en primera línea, hay actividades militares que son muy difíciles de identificar, hay tropas rusas y ucranianas operando; hay que detener esta locura”, agregó, según la agencia de noticias AFP. El funcionario advirtió en reiteradas ocasiones que las hostilidades militares entre Rusia y Ucrania en torno a la central de Zaporiyia podrían causar una fuga radiactiva que provoque un "desastre nuclear" de "consecuencias potencialmente catastróficas".
El Ejército ruso tomó control del enorme complejo de la central nuclear -que es la más grande de toda Europa- en marzo pasado, luego de haber invadido Ucrania a fines de febrero. Desde julio, Rusia denuncia que las fuerzas ucranianas bombardean la central, mientras que Ucrania respondió siempre que son las fuerzas rusas la que atacan la planta que ellas controlan.
Rusia fue la primera en denunciar este domingo los más recientes bombardeos y dijo que, pese a ellos, el nivel de radiación seguía siendo normal.
En un comunicado, el Ejército ruso afirmó que las fuerzas ucranianas dispararon más de 20 "proyectiles de gran calibre" contra la planta, que explotaron entre los bloques energéticos número 4 y 5 y alcanzaron el techo de un "edificio especial" situado cerca de estos bloques, agregó la nota.
A pesar de los bombardeos, "el nivel de radiación en la zona de la central sigue estando conforme a la norma", prosiguió el comunicado. Además, agregaron que Ucrania "no detiene sus provocaciones destinadas a crear una amenaza de una catástrofe provocada por el hombre en la planta nuclear de Zaporiyia".
La denuncia de Ucrania
Por su parte, el organismo nuclear ucraniano Energoatom culpó a Rusia de los ataques: "Esta mañana del 20 de noviembre de 2022, como resultado de numerosos bombardeos rusos, se registraron al menos 12 impactos contra el territorio de la central nuclear de Zaporiyia", aseguró en un comunicado y acusó a Rusia de "poner en peligro a todo el mundo una vez más".
Con información de Télam