La violencia continuó en las calles de Niamey, la capital de Níger, luego de que las Fuerzas Armadas declararan su apoyo al golpe de estado perpetrado en la noche del miércoles. Según informó Reuters, partidarios del derrocamiento del presidente, Mohamed Bazoum, saquearon e incendiaron la sede del partido gobernante, al tiempo que ondearon banderas rusas y corearon consignas antifrancesas, en consonancia con la creciente ola de resentimiento hacia la antigua potencia colonial Francia y su influencia en la región del Sahel.
“Se salvaguardarán los logros obtenidos con tanto esfuerzo. Todos los nigerianos que aman la democracia y la libertad se ocuparán de ello”, Bozoum escribió Bozoum en Twitter, en su primera declaración pública, pese a estar retenido.
Repercusiones internacionales
Estados Unidos, Rusia, la ONU y la Unión Europea (UE) exigieron la liberación de Bazoum, elegido en 2021 en la primera transferencia de poder pacífica y democrática en la nación del oeste de África desde su independencia de Francia en 1960. La detención del mandatario, de 63 años, amenaza esfuerzos de Occidente de estabilizar la región africana del Sahel, donde se han registrado varios golpes de Estado en los últimos años. Mali y Burkina Faso, vecinos de Níger por el oeste, han sufrido cuatro golpes de Estado desde 2020, y ambos enfrentan una ola de atentados y ataques de los grupos islamistas radicales Al Qaeda y Estado Islámico.
Ante esta situación, el jefe de la diplomacia estadounidense, el secretario de Estado Antony Blinken, dijo que pudo hablar con Bazoum para transmitirle "claramente que Estados Unidos lo apoya firmemente como presidente democráticamente electo de Níger". Rusia también reclamó la "pronta liberación" de Bazoum y llamó a las partes "a abstenerse de recurrir a la fuerza y a resolver todas las cuestiones controvertidas mediante un diálogo pacífico y constructivo".
El Alto Comisionado de la ONU para los Derechos Humanos dijo que estaba "consternado" por el "intento de golpe" en Níger: "Los miembros de su gobierno y sus familiares detenidos arbitrariamente también deben ser liberados inmediatamente y sin condiciones previas", indicó Volker Türk, en un comunicado.
La Unión Europea (UE) exigió, asimismo, la "liberación inmediata" del presidente y dijo que sus 27 Estados miembro estaban dispuestos a participar en los esfuerzos en curso "para encontrar una solución pacífica a este intento de golpe de Estado". "La Unión Europea reclama la liberación inmediata del presidente Bazoum, de su familia y de su entorno", remarcó Nabila Massrali, vocero del servicio diplomático de la UE. La Unión Africana (UA) condenó el "intento de golpe de estado" y pidió el "retorno inmediato y sin condiciones de los militares traidores a sus cuarteles". Francia, ex potencia colonial que tiene desplegados en Níger a 1.500 soldados, condenó "toda tentativa de tomar el poder por la fuerza".
¿Qué pasó en las últimas horas?
En Níger, los extremistas han cometido ataques contra civiles y personal militar, pero la situación general de seguridad en la nación de 25 millones de habitantes no era tan grave como en países vecinos hasta ayer por la mañana cuando miembros de la Guardia Presidencial de Níger rodearon la casa de Bazoum en Niamey, con él y su mujer adentro, y lo detuvieron. El grupo de oficiales que se hacen llamar Consejo Nacional para la Salvaguardia de la Patria, tomaron la televisión estatal y anunciaron que habían tomado el control del país debido a un deterioro de la seguridad y de la economía. Luego, anunciaron que suspendieron todas las instituciones, cerraron las fronteras y decretaron un toque de queda nocturno, al tiempo que advirtieron a actores externos contra interferir en sus acciones.
En tanto, analistas y medios de la región afirmaron que la supuesta razón del alzamiento fue la intención de Bazoum de despedir al comandante de la Guardia Presidencial, general Omar Tchiani. En este contexto, el canciller nigerino dijo que el Gobierno no aceptaba el "intento de golpe". "Hubo un intento de golpe, pero por supuesto que no podemos aceptarlo", dijo el ministro Hassoumi Massoudou a la cadena de noticias francesa France 24. “Llamamos a todos los patriotas demócratas nigerinos a levantarse en unidad y decir no a estas acciones facciosas que intentan hacernos retroceder décadas y que bloquean el progreso de nuestro país", agregó. El funcionario exigió la liberación sin condiciones del presidente y dijo que había conversaciones en curso con los rebeldes.
Apoyo de las Fuerzas Armadas
La situación se complicó horas más tarde cuando las Fuerzas Armadas dijeron que "suscribían" la declaración de los golpistas de que habían terminado con el "régimen" de Bazoum: "El comando militar de las fuerzas armadas nigerinas decidió suscribir la declaración de las fuerzas de defensa y de seguridad", dijo el jefe de Estado Mayor, el general Abdou Sidikou Issa, en un comunicado. Agregó que las Fuerzas Armadas tomaron la decisión con el fin de "evitar una confrontación mortal entre las diferentes fuerzas", además, consideraron que “toda intervención militar extranjera entrañará consecuencias catastróficas para el país y su población”. El presidente de Benín, Patrice Talon, que encabeza actualmente la Comunidad Económica de Estados de África del Oeste (Cedeao), tenía previsto liderar conversaciones de mediación entre el Gobierno de Níger y los golpistas, dijo la Cedeao.
Desde que se independizó de Francia en 1960, en Níger se produjeron numerosos intentos de golpe de estado, cuatro de ellos exitosos, el último en febrero de 2010, cuando fue derrocado el presidente Mamadou Tandja. Aliado clave de varios países occidentales, incluidos Estados Unidos y Francia, en la lucha contra el yihadismo en África Occidental, Níger logró hasta ahora evitar la inestabilidad política que afectó a otros países de la región por la inseguridad. Burkina Faso, Mali y Chad también se vieron afectados por diversas asonadas, varias de ellas debidas al descontento entre los militares por la lucha contra el yihadismo radicalizado. Sin embargo, varias partes de Níger, un país del Sahel, son presa de la violencia yihadista.
El país hace frente a la amenaza en el oeste por parte de la rama de Al Qaeda en Mali, el Grupo de Apoyo al Islam y los Musulmanes, y Estado Islámico en el Gran Sáhara. Asimismo, la región de Diffa, bañada por el lago Chad, es escenario de ataques con relativa frecuencia por parte de Boko Haram y de su escisión, Estado Islámico en África Occidental.