Los trabajadores de las centrales nucleares francesas comenzaron hoy una huelga por tiempo indefinido contra la reforma previsional que contempla la discutida extensión de la edad mínima de jubilación de los 62 a los 64 años, informó la Confederación General del Trabajo (CGT).
Esta medida de fuerza, a la que se irán sumando distintos sectores en los próximos días, derivará el martes 7 de marzo en una huelga general en todo el país, de acuerdo a lo dispuesto por los gremios franceses.
"Dado que el proyecto de ley ha pasado a discusión en el Senado, los empleados de (la empresa de servicios eléctricos) EDF que trabajan en las centrales nucleares están comenzando una huelga. La generación de electricidad se reducirá", dijo el sindicato en su cuenta de Twitter.
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En el sitio web de la compañía eléctrica se puede ver que las centrales nucleares Flamanville, Paluelle y Saint Alban generan 1.000 megavatios hora (MWh) menos de electricidad, lo que equivale a la potencia de una unidad de energía nuclear.
Sin embargo, según la CGT, el movimiento de protesta se ampliará.
Medios de comunicación franceses informaron que los trabajadores del sector del gas también se unieron hoy a la huelga.
Anteriormente, la CGT indicó que los sindicatos "tienen la intención de poner de rodillas a la economía francesa", si el Gobierno no retira el proyecto de reforma de las pensiones.
A partir del 6 de marzo, se unirán a la huelga los trabajadores de las refinerías, cuyas protestas en el otoño provocaron una grave escasez de combustible en las gasolineras francesas.
Los sindicatos declararon el 7 de marzo como el día de una huelga intersectorial que "paralizaría Francia".
Según los datos preliminares, prácticamente se detendrá el transporte público, se reducirán o cancelarán las clases en las instituciones educativas en todo el país, los aeropuertos de todas las ciudades principales reducirán el número de vuelos.
La primera ministra francesa, Élisabeth Borne, presentó el 10 de enero un proyecto de reforma según el cual las autoridades del país empezarán a retrasar la edad de jubilación tres meses al año a partir del 1 de septiembre de 2023, hasta alcanzar los 64 años en 2030.
La primera huelga de escala nacional contra la reforma en cuestión tuvo lugar en Francia el 19 de enero, ese día se desarrollaron más de 200 manifestaciones accediendo a los llamamientos de las ocho centrales sindicales más importantes de Francia.
Con información de Télam