El diputado francés Adrien Quatennens, considerado durante mucho tiempo el delfín del líder de la izquierda radical Jean-Luc Mélenchon, fue condenado hoy por la Justicia de Francia a cuatro meses de prisión con suspensión de pena por "violencia" contra su esposa.
El diputado fue condenado "por violencia sin incapacidad" entre octubre y diciembre de 2021, así como por el "envío regular y malintencionado de mensajes" a su mujer entre agosto y septiembre de 2022, según el juez, informó la agencia de noticias francesa AFP.
Quatennens, de 32 años, que reconoció los hechos y llegó a un acuerdo previo con la Fiscalía, también debe pagar 2.100 dólares por daños y perjuicios, en este caso que eliminó su posibilidad de liderar el partido La Francia Insumisa (LFI).
Este contenido se hizo gracias al apoyo de la comunidad de El Destape. Sumate. Sigamos haciendo historia.
Los hechos fueron revelados por el semanario Le Canard Enchainé a mediados de septiembre y, desde entonces, el exnúmero dos y cara visible de LFI dejó la coordinación del partido y su vuelta a la Asamblea Nacional parece comprometida por la severidad de la pena.
El bloque parlamentario de Quatennens anunció en un comunicado su exclusión "hasta el 13 de abril" y advirtió que su regreso estaba "condicionado al compromiso de seguir un curso" de concientización sobre "la violencia contra las mujeres".
Los aliados de LFI en la alianza de izquierdas Nupes, en cambio, exigieron su dimisión, un escenario que el legislador rechazó en una entrevista con el diario La Voix du Nord, en la que denunció un "linchamiento mediático".
"Dimitir tras haber sido condenado por una acto que he reconocido sentaría un peligroso precedente y abriría la puerta a una instrumentalización política de la vida privada", declaró el diputado.
Al término de la vista en la norteña Lille, su abogada, Jade Dousselin, ya había estimado que la decisión judicial era "un advertencia solemne", pero que "no le (impedía) regresar a la Asamblea y continuar con su mandato" de diputado.
Según la letrada, se lo condenó por una bofetada a su esposa "hace más de un año en un contexto muy tenso" y por "reiterados SMS, que el juez reconoció hoy que no eran de acoso, malintencionados o amenazantes".
El caso de Quatennens sacudió el partido que había convertido la lucha contra la violencia machista en una de sus prioridades.
La condena llega cuando cabezas visibles de la formación critican su falta democracia interna, tras el nombramiento el sábado pasado de Manuel Bompard, un allegado de Mélenchon, al frente del partido como responsable de "organización".
Con información de Télam