La fiscalía de Marsella informó el martes que abrió una investigación sobre la muerte de un joven de 27 años que fue alcanzado por un proyectil en el momento de los disturbios del sábado. Los denunciantes sostienen que la policía fue quien disparó contra la víctima
En toda Francia se produjeron incidentes tras el funeral de un adolescente de ascendencia norteafricana, cuyo muerte como consecuencia de un disparo de la policía durante un control de tráfico desencadenó disturbios en todo el país durante varios días.
La fiscalía sostuvo que la causa probable de la muerte en Marsella fue un violento impacto en el pecho de un proyectil "pelota de goma" de los utilizados por la policía antidisturbios, pero no especificó quién disparó ni a quién pertenecía el arma. El impacto provocó un paro cardiaco y la muerte súbita.
El joven murió en la noche del 1 al 2 de julio, mientras Marsella estaba sumida en disturbios y saqueos, pero los fiscales dijeron que no era posible determinar dónde estaba cuando le dispararon ni si la víctima había participado en los disturbios. El mayor foco de tensión se produjo el sábado en Marsella, donde la policía disparó gases lacrimógenos y libró batallas callejeras con jóvenes en el centro de la ciudad hasta altas horas de la noche. Las pistolas que lanzan pelotas de goma están diseñadas como armas antidisturbios no letales que no penetran en la piel, pero su uso por parte de la policía en Francia es controvertido, ya que los proyectiles han provocado la pérdida de ojos, heridas en la cabeza y otros traumatismos.
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Macrón: "El pico ya ha pasado"
El presidente francés, Emmanuel Macron, recibió hoy a más de 200 alcaldes de localidades golpeadas por los serios disturbios y prometió enviar al parlamento un proyecto para compensar a los comercios que hayan sido dañados, en medio de señales de remisión de la violencia, aunque no pudo asegurar si la "calma" será duradera.
"¿El regreso a la calma será duradero? Seré prudente, pero el pico que hemos visto en los últimos días ya ha pasado", dijo Macron al inicio de la reunión con los intendentes, a quienes expresó su "apoyo" y "reconocimiento" por su "acción".
Aunque el análisis de los hechos y la respuesta se anuncian complejos, Macron ya adelantó ante los alcaldes que presentará una ley urgente para reparar los daños causados y ayudas financieras para rutas, edificios municipales y escuelas.
El gobierno también se dijo abierto a "anular" las cotizaciones sociales y fiscales para los comercios atacados. La federación francesa de aseguradoras France Assureurs indicó que se declararon 5.800 siniestros por particulares y profesionales. La derecha y la ultraderecha piden mano dura contra los disturbios, mientras que la oposición de izquierda apunta también al polémico papel de la Policía en los suburbios.
Las primeras propuestas apuntan a la primera opción. Durante una visita la pasada noche a policías, Macron abogó por "sancionar económicamente" a las familias de los jóvenes que participen en los disturbios. El viernes, llamó a sus "padres" a mantenerlos en casa.
Con información de Noticias Argentinas y Télam.