El Parlamento de Finlandia designó hoy oficialmente al conservador Petteri Orpo como primer ministro al frente de un gobierno de coalición que incluye a la ultraderecha y que prevé endurecer la política migratoria y aplicar un programa de ajuste del gasto público.
Orpo, líder del partido de centroderecha Coalición Nacional, el más votado en las elecciones generales de abril pasado, obtuvo 107 votos a favor y 81 en contra en el Parlamento, en una sesión con 11 diputados ausentes, informó la agencia de noticias AFP.
La semana pasada, Orpo, de 53 años, anunció que formaría una coalición con el Partido de los Finlandeses, la formación de extrema derecha que quedó en segunda posición en las generales, y con otros dos pequeños partidos de derecha.
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Los cuatro partidos cuentan con 108 de los 200 escaños que tiene el Parlamento.
El viernes de la semana pasada, el nuevo gobierno presentó su hoja de ruta, que incluye un endurecimiento de la política migratoria. Esa cartera quedará en manos del Partido de los Finlandeses.
Los permisos de residencia que se otorguen en el marco de la protección internacional serán temporales y durarán el mínimo establecido por la Unión Europea (UE).
Los procesos de reunificación familiar serán más complicados, debido a estas políticas que se implementarán.
Además, el programa gubernamental prevé una reorganización del sistema de prestaciones sociales, para crear dos sistemas de seguridad social: uno para los migrantes y otro para los residentes permanentes.
De este modo, el nuevo primer ministro se aseguró apoyos para su plan de austeridad, de 6.000 millones de euros (6.500 millones de dólares), su principal promesa electoral.
El gobierno de Orpo sucede al de la expremier Sanna Marin, que dimitió en abril luego de que su Partido Socialdemócrata de Finlandia (SDP) saliera tercero en las elecciones y que recibió elogios por su gestión de la pandemia de coronavirus.
Durante su gestión, Finlandia se convirtió en miembro de la OTAN, renunciando a su histórica neutralidad debido a la guerra en Ucrania y a los temores a una agresión de Rusia, país con el que que tiene una extensa frontera.
Marin, que había seguido como primera ministra en funciones, se despidió hoy del cargo que había venido ocupando los últimos tres años y medio, y agradeció a quienes la acompañaron en un periodo que ella mismo ha descrito como "difícil".
"Han sido años difíciles, pero estoy agradecida por haber podido servir al país", escribió Marrin en Twitter, donde dio por destituido a su equipo y confirmó el inicio de una nueva etapa política.
Con información de Télam