La agencia nuclear de la ONU admitió hoy que no puede "garantizar que el programa nuclear iraní sea exclusivamente pacífico", debido a la falta de explicaciones sobre la detección de uranio enriquecido en las instalaciones no declaradas del país islámico.
En un informe días antes de una reunión de gobernadores del Organismo Internacional de Energía Atómica (OIEA), el organismo afirmó que su director general, el argentino Rafael Grossi, está "cada vez más preocupado" por la falta de "avances" en el esclarecimiento de la presencia de material nuclear en tres instalaciones no declaradas.
Por ello, el informe pide a Irán "que responda a sus obligaciones legales" lo antes posible.
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Esta cuestión es uno de los puntos más ásperos de la negociación diplomática que arrancó en abril de 2021 en Viena para reactivar el acuerdo de 2015.
El mismo proponía garantizar la naturaleza civil del programa atómico iraní mediante limitaciones drásticas a cambio de un alivio de las sanciones económicas vigentes contra la república Islámica.
El pacto colapsó en 2018 cuando Estados Unidos anunció su retiro, por decisión unilateral de su entonces presidente Donald Trump.
Teherán reclamó nuevamente hoy el cierre de la investigación del OIEA, a fin de alcanzar un nuevo acuerdo con todas las partes (Reino Unido, Estados Unidos, Francia, China, Rusia, Alemania y la UE).
La semana pasada, Irán dijo que estudia "con el debido cuidado y rapidez" la contrapropuesta de Estados Unidos para rescatar el acuerdo nuclear de 2015, pero marcó límites a la interferencia del organismo nuclear de la ONU en su soberanía para avanzar en el tema, en referencia a las investigaciones del OIEA sobre los rastros de uranio enriquecido encontrados en tres lugares no declarados.
En otro informe, el OIEA destacó que Irán siguió acumulando uranio enriquecido en los últimos meses y que su cantidad supera 19 veces el límite autorizado por el acuerdo internacional de 2015, reportó la agencia de noticias AFP.
Irán elevó sus reservas totales al 21 de agosto a 3.940,9 kilogramos, frente a los 3.809,3 kg que tenía a mitad de mayo y muy por encima del tope de 202,8 kilos comprometido.
Las potencias mundiales han pasado casi 18 meses tratando de negociar un acuerdo para restablecer límites estrictos a la actividad nuclear de Irán a cambio de que Estados Unidos relaje algunas de sus sanciones sobre la economía de la república persa, entre ellas la impuesta a sus exportaciones de petróleo.
Irán siempre sostuvo que su actividad nuclear no persigue objetivos bélicos, sino médicos y de provisión de energía.
Con información de Télam
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