El secretario de Estado de Estados Unidos, Antony Blinken, dijo hoy que el envío de una fuerza de intervención a Haití está en discusión y que el tema estará presente en las conversaciones que mantendrán hoy el presidente Joe Biden en su visita a Canadá.
"Hay discusiones sobre algún tipo de fuerza multinacional de Naciones Unidas", en las que Estados Unidos "está participando activamente", declaró Blinken al Comité de Asuntos Exteriores de la Cámara de Representantes.
Pasaron meses desde que gobernantes haitianos y las Naciones Unidas pidieran por primera vez una nueva misión internacional para estabilizar a la nación más pobre del hemisferio occidental, afectada por la violencia de las pandillas, el deterioro de la salud pública y la inestabilidad política.
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"El presidente irá a Canadá esta noche, y entablaremos conversaciones con el gobierno canadiense sobre lo que podríamos hacer junto con otros países" integrantes del Caricom, la alianza de naciones del Caribe, señaló Blinken, según recogió la agencia de noticias AFP.
Reiteró que Estados Unidos apuntará a reforzar a la incipiente Policía Nacional de Haití, que, según él, no cuenta con los "recursos adecuados".
Estados Unidos tiene una larga historia de intervención en Haití, pero Biden dejó en claro que es reacio a desplegar tropas en el extranjero y puso fin a la guerra de Afganistán al comienzo de su mandato.
El martes pasado, la Oficina del Alto Comisionado de la ONU para los Derechos Humanos (Oacdh) denunció que cerca de 530 personas fueron asesinadas este año, muchas de ellas por francotiradores, y cerca de 280 secuestradas por pandillas que operan en Haití con impunidad.
Según la ONU, las pandillas intentan ampliar su control territorial en la capital y otras regiones, atacando a las personas que viven en zonas controladas por sus rivales.
Hasta la fecha, esta ola de violencia obligó a unas 160.000 personas a desplazarse a casas de familiares o amigos, donde a menudo deben compartir los escasos alimentos, el agua y las medicinas con otras familias.
La inestabilidad crónica y la violencia dispararon los precios de los alimentos y la mitad de la población de Haití carece de comida suficiente, recordó Hurtado.
El Alto Comisionado de la ONU para los Derechos Humanos, Volker Turk, instó a las autoridades de Haití a que enfrenten la situación de la seguridad, con un refuerzo de la policía y una reforma del sistema judicial.
Haití, el país más pobre del continente americano, lleva años sumido en una crisis humanitaria, económica y política exacerbada desde el asesinato del presidente Jovenel Moise en 2021 y acentuada por el auge de la violencia de las pandillas.
Con información de Télam