El gobernante movimiento islamista talibán de Afganistán anunció hoy haber matado en operaciones separadas en las últimas semanas a dos comandantes del grupo yihadista Estado Islámico (EI) acusados de haber cometido atentados contra misiones diplomáticas y mezquitas de la capital del país, Kabul.
Los ataques extremistas se redujeron en Afganistán desde que los talibanes tomaron el poder, en agosto de 2021, aunque en el último año la violencia ha ido en aumento, con una serie de ataques mortales reivindicados por la filial local del grupo radical sunnita Estado Islámico.
El vocero del Gobierno talibán, Zabihullah Mujahid, informó anoche en un comunicado que el "jefe de Inteligencia y operaciones" regionales del EI, Qari Fateh, murió el domingo a la noche en una redada.
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Fateh "orquestó directamente operativos recientes en Kabul, incluidas algunas contra misiones diplomáticas, mezquitas y otros blancos", precisó Mujahid, quien subrayó que era el "cerebro" detrás de las operaciones en Kabul.
"Gracias a Dios, el criminal ha recibido justicia por sus acciones brutales a manos de las fuerzas especiales del Emirato Islámico de Afganistán durante una operación compleja", agregó Mujahid, informó la agencia de noticias Europa Press.
Un medio de comunicación afín al EI confirmó hoy la muerte de Fateh citando un chat de Telegram administrado por el grupo extremista.
Fateh figuraba en un informe del Consejo de Seguridad de la ONU de julio de 2022 señalado como un dirigente clave de EI, encargado de operaciones militares en una zona que abarca a India, Irán y Asia Central.
El vocero talibán dijo también que, en una operación a principios de este mes, otros tres miembros del EI, incluido el alto cargo Ijaz Amin Ahingar, fueron asesinados.
"Con ayuda de Dios, varios miembros de Estado Islámico, incluidos extranjeros, que planeaban ataques mortales han sido neutralizados durante los últimos días", agregó Mujahid, sin dar detalles sobre estas operaciones.
El EI surgió en Irak a fines de la década de 1990 y cobró fama mundial en 2014 cuando conquistó extensos territorios de ambos países en los que formó un "califato" hasta que fue derrotado por potencias extranjeras y las fuerzas sirias e iraquíes, en 2019.
Estado Islámico Provincia de Jorasán (ISKP), la rama afgana del grupo, considera a los talibanes unos traidores a la ortodoxia de la 'sharia' o ley islámica y defiende una interpretación mucho más dura.
El EI ha sido la mayor amenaza de seguridad del gobierno talibán, con ataques contra extranjeros, minorías religiosas e instituciones gubernamentales.
Ambos grupos comparten la estricta ideología islamista sunnita, pero el EI lucha por establecer un "califato" mundial, mientras que los talibanes tienen la aspiración local de gobernar un Afganistán independiente.
El EI se atribuyó un ataque a tiros en diciembre contra un hotel de Kabul, donde cinco chinos resultaron heridos.
En ese mismo mes, el grupo atacó la embajada paquistaní en Kabul, una acción que Islamabad calificó como un "intento de asesinato" contra su embajador.
El diplomático paquistaní, que al momento del atentado caminaba por el césped dentro del complejo de la embajada, resultó ileso, pero uno de sus guardias fue herido.
Antes, en septiembre de 2022, fueron señalados por un ataque suicida en Kabul que dejó 54 muertos, incluidas 51 mujeres y niñas.
Los talibanes volvieron al poder en Afganistán en agosto de 2021, a medida que las fuerzas estadounidenses y de la OTAN se retiraban del país tras 20 años de una guerra para combatirlos.
Con información de Télam