La lava que brota de la primera erupción volcánica en tierra firme de las Islas Canarias en 50 años ha obligado a las autoridades a evacuar otra parte del municipio de El Paso, en la isla de La Palma, y a pedir a los turistas atraídos por el fenómeno que se mantengan alejados.
Los habitantes del barrio de Tacande Alto fueron evacuados a última hora del lunes y a primera hora del martes después de que un nuevo chorro de lava comenzara a fluir desde otra grieta en la ladera del volcán Cumbre Vieja, según dijo el alcalde de El Paso, Sergio Rodríguez, a la cadena estatal TVE.
Unas 6.000 personas de las 80.000 que viven en la isla se han visto obligadas a abandonar sus hogares para escapar de la erupción hasta ahora, dijo TVE.
El volcán entró en erupción el domingo después de que La Palma, la isla más noroccidental del archipiélago canario, se viera sacudida por miles de temblores en los días anteriores. Ha disparado lava a cientos de metros en el aire, ha engullido bosques y ha enviado roca fundida hacia el océano sobre una zona poco poblada de La Palma.
No se ha informado de víctimas ni de heridos, pero imágenes de drones captaron dos lenguas de lava negra que cortaron una franja devastadora en el paisaje mientras avanzaban por el flanco occidental del volcán hacia el mar.
Los expertos afirman que, si la lava llega al mar, podría desencadenar más explosiones y nubes de gases tóxicos.
Las autoridades marítimas mantienen cerrada un área de dos millas náuticas en el mar alrededor de la zona como medida de precaución para evitar la presencia de curiosos en las embarcaciones y evitar que los gases afecten a las personas, dijo el presidente del Cabildo de La Palma, Mariano Hernández, a la emisora de radio Cadena SER.
"Tenemos un sistema de seguridad para cuando la lava llegue al mar. Insistimos en que las personas no utilicen el vehículo para ir a verlo porque se está produciendo colapso en la isla", dijo.
Inicialmente se esperaba que el flujo de lava llegara a la costa el lunes por la tarde, pero su velocidad ha disminuido en las últimas horas.
Un testigo de Reuters vio cómo el flujo de roca fundida envolvía lentamente una casa en el pueblo de Los Campitos, incendiando el interior y enviando las llamas a través de las ventanas y hacia el techo.
Hasta el martes por la mañana, la lava ha cubierto 103 hectáreas y ha destruido 166 casas, según los datos publicados por el servicio de gestión de emergencias Copernicus de la Unión Europea.
Las autoridades de emergencia han dicho que los residentes no deben temer por su seguridad si siguen las recomendaciones.
Con información de Reuters
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