A siete días de las elecciones generales en España, los dos principales candidatos a presidir el gobierno, el actual mandatario socialista Pedro Sánchez y el líder del Partido Popular (PP) conservador, Alberto Núñez Feijóo, realizaron actos este fin de semana con discursos que apuntaron a disputar el voto de los indecisos y de las mujeres, informó hoy la prensa local.
El secretario general del Partido Socialista Español (PSOE) se dirigió especialmente a las mujeres durante un acto en Barcelona y advirtió que aquellos que piensan "que el lugar de las mujeres está en casa" lo que quieren es que se queden en casa el 23 de julio y no vayan a depositar su voto.
"Pero hay que salir a votar al PSOE", demandó.
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En la recta final de la campaña, con el foco puesto en captar votantes indecisos, Sánchez apeló a los jóvenes.
"Sé que hay mucho indeciso" entre ellos, apuntó y afirmó que lo que se juega en estas elecciones es el futuro de España y, por tanto, "su futuro", según la agencia de noticias Europa Press
En junio, antes del inicio de la campaña, el Centro de Investigaciones Sociológicas (CIS) publicó una encuesta basada en casi 30.000 entrevistas en toda España, en la que más de 70% aseguró que acudiría a votar. De ese porcentaje, 13,8% confesaba que tenía dudas entre dos partidos.
Si la participación fuese efectivamente de 70%, ese porcentaje representaría 3,4 millones de electores, informó el diario El País, de Madrid.
Sánchez indicó que optar por el PP o el ultraderechista partido Vox puede llevar al "retroceso" y llamó a elegir la boleta del PSOE para que España avance.
Además, subrayó que en la elección no se elige entre Sánchez o España, como a su juicio trata de plantear la derecha, sino que hay que decidir entre un gobierno de Sánchez y otro de Núñez Feijóo en coalición con el líder de Vox, Santiago Abascal.
El mandatario estuvo en el acto junto al líder del Partido de los Socialistas de Cataluña (PSC), Salvador Illa, la presidenta del Congreso de los Diputados y cabeza de lista por ese distrito, Meritxell Batet y el alcalde de la ciudad, Jaume Collboni, Sánchez llamó a la movilización para que ningún voto se quede en casa.
Por su parte, el líder del PP también se dirigió a las mujeres y recordó lo que ocurrió con la llamada ley del 'solo sí es sí', una norma contra la violencia sexual que establece la obligación de un consentimiento explícito, una medida que el gobierno progresista abanderó después de la violación grupal de "La Manada" a una joven en 2016 pero que el PP y Vox rechazaron durante su votación en el parlamento.
"Si votamos, habrá un gobierno competente y no hará leyes como la ley del sí es sí. Y después dicen que quieren el voto de las mujeres. ¿De qué mujeres? ¿De las mujeres que han sido atacadas por personas condenadas por violación que vuelven a estar en la calle?, ¿De esas mujeres de las mujeres que han sido víctimas de abusos sexuales y que han visto a más de 1.100 condenados por abusos sexuales rebajada su pena por esta ley?", enfatizó.
Núñez Feijóo también llamó al voto útil cuando pidió a las personas "centradas y moderadas" y a los socialistas "decepcionados" con la gestión de Sánchez, que concentren el voto en el PP para repetir el "éxito" de Andalucía que llevó hace un año a Juanma Moreno a cosechar una holgada mayoría absoluta.
Pese a que las encuestas en España señalan que ni el PSOE ni el PP tendrán escaños suficientes para gobernar en solitario, Nuñez Feijóo se ha enfocado en este tramo final de la campaña en reclamar para sí todos los votos opositores, en detrimento de Vox, su socio en varios gobiernos regionales y municipales.
El opositor agregó que "la única boleta que garantiza el cambio es la boleta del PP" y que de este modo el PSOE de Sánchez no podrá "perturbar la democracia" e "imposibilitar la alternancia política".
"Si concentramos el voto en el cambio, el cambio sale", dijo.
El PP aparece como el más cercano a obtener la mayoría de los votos para conformar el nuevo Congreso, de 350 miembros, aunque sin llegar a los 176 escaños que le permitirían desplazar a la coalición de gobierno que lidera el PSOE.
De no mediar un acuerdo entre ellos, los resultados del izquierdista Sumar -liderado por la vicepresidenta segunda del Gobierno, Yolanda Díaz, y cuyos miembros integran la administración de Sánchez- y Vox en su disputa por el tercer lugar pueden ser determinantes para definir si el próximo Ejecutivo quedará en manos de una alianza de izquierda o de derecha.
El PP llega a estos comicios con el impulso que le dio su victoria en las elecciones autonómicas y municipales del último 28 de mayo, en las que le arrebató a los socialistas alcaldías importantes como las de Sevilla y Valencia, además de revalidar con mayoría absoluta los gobiernos en la ciudad y en la comuna de Madrid.
Pero en esas elecciones también le fue bien a Vox, quienes pretenden integrar con peso propio una coalición liderada por el PP, a cambio de marcar una agenda que dé marcha atrás con las conquistas y leyes sociales del actual Gobierno, sobre todo en temas como las políticas de inmigración, el alineamiento internacional y el reconocimiento de los derechos de los colectivos LGTBIQ+, entre otros.
Otro tema que ha ingresado en la campaña es la relación de España con los países iberoamericanos.
Los cuatro principales partidos expresan su voluntad de seguir profundizando en este ámbito, pero mientras PSOE y PP obvian las críticas por algunos líderes de la región hacia España y lo que supuso la Conquista para el continente, Vox se compromete a combatir los intentos de "borrar" dicho legado mientras que Sumar apuesta por una "reflexión conjunta" respecto a ese pasado compartido.
Con información de Télam