Donald Trump no logra convencer a todos los republicanos duros. El ex vicepresidente de George W. Bush, Dick Cheney, sorprendió al sumarse a su hija, la ex congresista Liz Cheney, y dar su apoyo público a la candidatura presidencial de la actual vice y líder demócrata, Kamala Harris. En las últimas horas, la dirigente oficialista les agradeció y calificó a su decisión como "valiente", ya que priorizaron sus valores democráticos a la posición de su partido.
Durante una visita a Pittsburgh, donde se encontraba preparándose para el debate crucial del 10 de septiembre frente a Trump, Harris destacó la importancia de estos respaldos inesperados para las elecciones del 5 de noviembre, a menos de dos meses de la votación y cuando algunas encuestas muestran que la actual vicepresidenta puede vencer.
"Me siento honrada de contar con su apoyo", afirmó Harris mientras hacía una breve pausa en Penzeys Spices, una tienda ubicada en el Strip District de Pittsburgh. En ese lugar, además de intercambiar saludos con los clientes y realizar algunas compras, aprovechó para comentar sobre la importancia del gesto de los Cheney. Según Harris, su respaldo simboliza una declaración valiente de que "está bien y es importante poner al país por encima del partido".
Dick Cheney, quien sirvió como vicepresidente durante la administración de George W. Bush entre 2001 y 2009 y fue históricamente visto como un halcón dentro del Partido Republicano, se pronunció el viernes con duras palabras contra Trump.
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En su declaración, Cheney afirmó que "en los 248 años de historia de nuestra nación, nunca ha habido un individuo que sea una mayor amenaza para nuestra república que Donald Trump". Estas palabras subrayan la gravedad con la que el ex vicepresidente percibe la influencia de Trump, presidente entre 2017 y 2021, en la política estadounidense.
Por su parte, Liz Cheney, conocida desde hace tiempo por su postura crítica hacia Trump, anunció el miércoles que votaría a favor de Kamala Harris. Al hacerlo, calificó al ex presidente republicano como un "peligro" para el país, reforzando aún más su oposición a la figura de Trump y sus políticas.
La respuesta de Trump no se hizo esperar. En un mensaje publicado en redes sociales el viernes, el ex presidente arremetió contra los Cheney, calificando a Dick Cheney como un "RINO (republicano solo de nombre, según las siglas en inglés) irrelevante junto con su hija". Trump utilizó así el término "Republicans in Name Only", una expresión que aplica a aquellos republicanos que no muestran lealtad hacia él, en un claro intento de desacreditar sus opiniones y minimizarlas.
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