Con dos tercios de los votos escrutados, el expresidente y candidato del Partido de los Trabajadores (PT) Luiz Inácio Lula da Silva aventaja a su rival, el presidente Jair Bolsonaro, pero aún lejos de poder vencer en la primera vuelta. Con algunos números ya sobre la mesa, las miradas apuntan a lo que sucede en el estado de Minas Gerais, un distrito clave que en las últimas elecciones ha indicado el resultado nacional.
Minas Gerais cuenta con una superficie de casi 600.000 metros cuadrados, pero el factor diferencial reside en la cantidad de habitantes que tiene. En los últimos años, la región creció de forma exponencial hasta alcanzar en 2020 los 21,3 millones de habitantes.
Esto hace que Minas Gerais sea el segundo estado más poblado del país, solo por detrás de San Pablo. Minas se convirtió desde 1989 en un feudo para los ganadores de las elecciones presidenciales. Cerca de uno de cada diez votantes se encuentra en esa región, que termina siendo decisiva en la contienda electoral.
Con cerca del 90 por ciento de los votos escrutados, Lula saca ventaja en Minas Gerais y alcanza el 47,7 por ciento, frente a un 44,0 de Bolsonaro. Desde que comenzó el escrutinio la tendencia se mantuvo igual. Desde 1989, todos candidatos que ganaron lo hicieron en Minas Gerais. En esta elección el bolsonarismo está haciendo una buena pasada en la categoría gobernador en todo el sudeste y eso incluye Minas, San Pablo y Río de Janeiro, bastión bolsonarista.