El ex presidente y actual favorito para recuperar el poder en el balotaje del próximo 30 de octubre, Luiz Inácio Lula da Silva, quiere que si gana va a volver a limitar el tiempo que un militar activo puede ocupar un cargo político en Brasil, es decir, derogará un decreto del actual presidente y rival electoral, Jair Bolsonaro. No se trata de un anuncio más: la presencia e influencia de los militares -activos o retirados- ha sido una de las características más importantes de este Gobierno e incluso ha sido uno de los datos que más se repiten en las críticas a la mala gestión de salud, educación y otras aéreas sociales claves.
La campaña de Lula espera poder fijar un plazo máximo para que un militar ocupe un cargo de naturaleza civil y establecer sanciones como pasar a reserva si permanece en ese cargo, según el diario Folha de Sao Paulo. Antes de Bolsonaro, según el antiguo Estatuto de los Militares, los oficiales tenían que pasar a la reserva si pasaban más de dos años en cargos de naturaleza civil. El actual Gobierno anuló esta regla, lo que habilitó a que el sector castrense se volviera uno de los más importantes en el Poder Ejecutivo.
La iniciativa hilaría así con el discurso de Lula en campaña sobre "despolitizar" a las Fuerzas Armadas. Así, espera poner a un civil al frente del Ministerio de Defensa y destituir a "casi 8.000 militares" de otros cargos. En particular, los oficiales consultados por Folha de Sao Paulo temen que Lula introduzca cambios en tres puntos clave: reglas de jubilación, currículo de formación militar y criterios para la promoción de oficiales.
El gabinete de Bolsonaro cuenta con personas que defienden la dictadura de 1964-1985, entre ellos el propio Bolsonaro, capitán de la reserva del Ejército, mientras que su vicepresidente, Hamilton Mourao, es general en la reserva. Junto a ellos y entre otros, el ministro de Defensa y otrora jefe del Estado Mayor, Walter Souza Braga Netto; el secretario de Seguridad Institucional, el general Augusto Heleno Ribeiro; y los titulares de Infraestructuras, el capitán Tarcísio Gomes de Freitas; y el de Minas y Energía, el almirante de la Armada, Bento Costa Lima.
Con información de EuropaPress.