El globo espía, una táctica de larga data que sigue vigente pese al avance de la tecnología

03 de febrero, 2023 | 15.52

La acusación del gobierno de Estados Unidos sobre la presencia de un supuesto globo espía chino en su territorio volvió hoy a poner en el centro de escena a este sistema para recabar información de Inteligencia que se resiste a desaparecer frente a estrategias más modernas y menos invasivas como la utilización de satélites.

El primer uso de globos aerostáticos para fines militares del que se tiene constancia data de 1794, durante las guerras revolucionarias francesas, y a Estados Unidos llegaron en el siguiente siglo, coincidiendo con la Guerra de Secesión (1861-1865).

Podían alcanzar cerca de 300 metros y servían para tareas de observación, como consta en un informe histórico del Servicio de Parques Nacionales estadounidense reproducido por la agencia de noticias Europa Press.

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Por entonces se consideraban herramientas baratas, discretas y prácticamente inalcanzables desde tierra, aunque su verdadera explosión llegó ya en el siglo XX, durante la Primera Guerra Mundial, y también en etapas como la Guerra Fría, cuando el pulso político que libraron la Unión Soviética y Estados Unidos se extendió también al ámbito de la Inteligencia y el progreso tecnológico impulsó la tecnología de vigilancia sin tripulación.

En ese contexto, la utilización de satélites dejó en parte obsoletos a los globos, pero su uso no desapareció y, por el contrario, el Departamento de Defensa estadounidense aumentó el año pasado la inversión en este tipo de sistemas, reseñó el portal de noticias Político.

En declaraciones reproducidas por la cadena CNN, el analista Peter Layton, del Griffith Asia Institute de Australia, explicó que la miniaturización de equipos tecnológicos fomentó el uso de globos, que al pesar menos "pueden ser más pequeños, más baratos y más fáciles de lanzar" que los satélites.

Otro experto, Blake Herzinger, del American Enterprise Institute, apuntó además que este tipo de sistemas deja poco rastro, lo que dificulta su rastreo, a diferencia de los satélites que son más predecibles al seguir una misma órbita.

Frente a los satélites, los globos ofrecen la ventaja de concentrarse en un mismo territorio durante más tiempo y, al situarse dentro de la atmósfera terrestre, tienen otro tipo de alcance.

De hecho, Layton apuntó como hipótesis que el último globo detectado en Estados Unidos pudiese estar recabando información sobre sistemas de comunicación y radares, inaccesibles desde el espacio.

Según el Pentágono, el globo chino sobrevoló Montana (noroeste del país) a unos 12.000 metros y no supuso ningún riesgo para la población ni para la navegación aérea.

Las autoridades no dieron detalles sobre las características técnicas del globo, aunque a pedido del presidente Joe Biden, el Departamento de Defensa examinó la posibilidad de derribar el aparato, pero tomó la decisión de no hacerlo debido a los peligros potenciales para las personas en tierra.

China, por su parte, confirmó hoy que el globo localizado en el espacio aéreo del país norteamericano es de su propiedad, pero negó que sea utilizado para espionaje al afirmar que es de "naturaleza civil para asuntos meteorológicos".

"El globo procede de China. Se trata de una aeronave civil utilizada con fines de investigación, principalmente para asuntos meteorológicos. Afectada por los vientos y con una capacidad de autodirección limitada, se desvió mucho de su rumbo previsto", indicó la portavoz de la cancillería, Mao Ning, de acuerdo a un comunicado subido a la web oficial.

Con información de Télam