Estados Unidos exhortó hoy a Beijing a detener su "conducta provocativa y riesgosa" en el mar de China Meridional, después de que un incidente casi provocara una colisión entre un patrullero filipino y un guardacostas chino, en medio de crecientes tensiones en esa región asiática del Pacífico.
"Hacemos un llamado a Beijing para que desista de su conducta provocativa y riesgosa", dijo el portavoz del Departamento de Estado, Matthew Miller, y agregó que cualquier ataque contra las Fuerzas Armadas filipinas desencadenaría una respuesta estadounidense.
La advertencia estadounidense llega dos días antes de que el presidente Joe Biden reciba en la Casa Blanca a su homólogo filipino, Ferdinand Marcos.
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El incidente se produjo el domingo pasado, cuando dos barcos de una flota filipina se dirigían al arrecife Second Thomas Shoal, -que se disputan varios países- con el objetivo de hacer valer sus reivindicaciones territoriales.
Cuando uno de ellos llegó cerca del arrecife, un guardacostas chino del doble de su tamaño le cortó el paso. La distancia entre el barco chino y el filipino era de sólo 45 metros.
La portavoz de la Cancillería china, Mao Ning, calificó la aproximación de barcos filipinos a esa región como una "deliberada provocación".
Mao aseguró que la respuesta de las embarcaciones de su país fue "profesional y moderada", a pesar de que la acción "premeditada y provocadora que los barcos filipinos" al ingresar en aguas de Ren'ai Jiao (el nombre en chino de las islas Spratly) buscaba "promocionar un posible incidente".
Beijing reivindica la casi totalidad del mar de China Meridional, incluyendo las islas Spratly, en disputa con Filipinas, Taiwán, Vietnam, Malasia y Brunéi.
Según un comunicado de la Cancillería filipina, las maniobras realizadas por la Guardia Costera de China en el mar de China Meridional fueron "totalmente incompatibles con la libertad de navegación" y "altamente peligrosas".
La Armada filipina mantiene en el Second Thomas Shoal (un atolón en las Islas Spratly) un pequeño contingente militar a bordo de un barco estadounidense que fue varado deliberadamente en 1999 para reforzar los reclamos territoriales de Filipinas.
El episodio de las embarcaciones que casi colisionan, por otra parte, se produce en medio de una creciente tensión en esa región asiática del Pacífico, apenas días después de que tropas de Estados Unidos y Filipinas culminaran las maniobras militares conjuntas más grandes de su historia en el mar de la China Meridional.
Con información de Télam