La Administración de Alimentos y Medicamentos (FDA, por sus siglas en inglés) de Estados Unidos aprobó la primera píldora anticonceptiva de venta libre, en una decisión inédita en el país, que llega en medio de una seria avanzada judicial contra los derechos reproductivos de las mujeres.
A partir del año próximo, la píldora diaria Opil estará a la venta en farmacias, comercios y supermercados, así como en línea, sin restricción de la venta por edad, informó la FDA en un comunicado, en el que estimó que esta decisión debería "reducir las barreras de acceso" a este método anticonceptivo.
"Cuando se utilizan según las indicaciones, los anticonceptivos orales diarios son seguros y se espera que sean más eficaces que los métodos anticonceptivos sin receta disponibles en la actualidad para prevenir embarazos no deseados", declaró Patrizia Cavazzoni, directiva de la FDA, citada por la agencia de noticias AFP.
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En Estados Unidos casi la mitad de los 6,1 millones de embarazos anuales son no deseados, según la FDA.
Muchos países ya permiten la venta libre de píldoras anticonceptivas, pero en Estados Unidos el anuncio llega en un momento en que el ala dura de los conservadores se opone al derecho al aborto, que fue prohibido en varios estados luego de que el año pasado, la Corte Suprema anulara el fallo judicial que desde la década del 70 protegía ese derecho.
La píldora, fabricada por la compañía farmacéutica HRA Pharma, recientemente adquirida por Perrigo, está autorizada desde hace años en el país, pero con receta.
Las píldoras basadas en hormonas son la forma más común de control de la natalidad en Estados Unidos, utilizadas por decenas de millones de mujeres desde la década del 60.
Las asociaciones de médicos y promotoras de la salud reproductiva femenina hicieron campaña a favor de un mayor acceso, señalando que aproximadamente el 45% de los 6 millones anuales de embarazos son involuntarios.
Las adolescentes y las niñas, las mujeres negras y las de bajos ingresos son las que más se enfrentan a obstáculos para obtener recetas y pagar las píldoras.
Esos obstáculos son, entre otros, pagar la visita médica, obtener permiso de salida del trabajo y conseguir niñera.
Con información de Télam