Para Trump, tener coronavirus "fue una bendición de Dios"

El presidente de Estados Unidos lo dijo hoy, a sólo seis días de contraer Covid-19 y antes de cumplir su cuarentena.

08 de octubre, 2020 | 13.10

El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, lanzó una frase lamentable a sólo seis días de contraer Covid-19 y antes de cumplir su cuarentena: dijo que para él tener coronavirus fue "una bendición de Dios".

Trump volvió a su oficina en el Salón Oval, en la Ala Oeste de la Casa Blanca, donde trabajan decenas de sus asesores y de periodistas, realizó esas declaraciones que dieron vuelta al mundo.

"Si estas en el hospital y te sientes mal, estamos trabajando para que obtengas las mismas drogas que tomé, que lo obtengas gratis y rápido, tenemos cientos de miles de dosis que están casi listas", aseguró.

Siguió Trump: "Ya tengo todo listo para autorizarlo, lo vamos a firmar ya y se van a recuperar. Les dicen terapeúticas pero para mi no fueron terapeúticas, me hicieron bien...yo digo que son una cura".

Lo hizo en un video difundido en su Twitter. Desde el jardín de la Casa Blanca y sin tapabocas, el mandatario aseguró que lograr la aprobación de estas drogas experimentales, principalmente Regeneron, es ahora "mucho más importante que la vacuna".

"Tenemos que producirlas, tenemos que hacer que se aprueben y tenemos que llevarlas a los hospitales para que la gente se sienta mejor, para mi eso es mucho más importante que la vacuna. Quiero que todos reciban el mismo tratamiento que su presidente porque me siento bien, me siento perfecto. Creo que fue una bendición de Dios que me contagiara. Me contagié, me enteré de esta droga, la tomé y fue increíble cómo funcionó", explicó.

Por primera vez desde que le dieron el alta el lunes a última hora de la tarde y pese a que sus médicos dijeron que el virus puede seguir activo entre 7 y 10 días, Trump salió del aislamiento de su residencia en el segundo piso de la Casa Blanca y trabajó desde su oficina, una zona del edificio llena de asesores, empleados administrativos y hasta periodistas.

"Me acaban de informar sobre el huracán Delta, y hablé con los gobernadores de Texas (Greg Abbott) y de Luisiana, John Bel Edwards. Por favor, sigan las indicaciones de sus líderes estatales y locales", tuiteó el magnate poco después.