El presidente de Perú, Pedro Castillo, instó a la Fiscalía a que excluya a un fiscal por haber actuado de manera "abusiva" en una intervención en el Palacio de Gobierno en el marco de una causa por corrupción en la que el mandatario se puso a disposición de la justicia y hasta pidió que se levante su secreto bancario, tributario y telefónico para facilitar la investigación.
"El fiscal adjunto Luis Alberto Medina ha querido realizar diligencias en la Secretaría del Despacho Presidencial, quitándole teléfonos móvil, máquinas, computadores, archivos y tomar declaraciones a las secretarias, asistentes, personal policial y a todas las personas" allí presentes, a quienes "este fiscal adjunto amenazó con señalar que las iba a denunciar por el delito de obstrucción a la Justicia", denunció Castillo a través de su abogado.
El mandatario dijo que observó "con preocupación" el actuar de la Fiscalía en una intervención que considera fue "abusiva y avasalladora" y en la que además, lamentó, se ha filtrado "información privilegiada" a la prensa, facilitando así un "juicio paralelo", recoge hoy el diario peruano La República.
Castillo mantuvo ayer un encuentro con la fiscal de la Nación, Zoraida Ávalos, en el que habría anunciado que presentará una queja por el intento de los fiscales de acceder hasta el despacho presidencial, consignó la agencia de noticias Europa Press.
"La defensa del presidente Castillo intervino para expresar su preocupación por la intervención, el día de ayer (por el lunes), de un equipo de fiscales que pretendió ingresar hasta el despacho presidencial", señaló la Fiscalía en un comunicado.
Sin embargo, el Ministerio Público recordó que "los fiscales son autónomos" y que disponen de "plena facultad" para "diseñar su estrategia de investigación".
Efectivos de la Fiscalía Anticorrupción peruana llegaron anteayer al Palacio de Gobierno para investigar las presuntas irregularidades en una licitación de 74 millones de dólares otorgada a la empresa Heaven Petroleum Operators (HPO) tras una reunión de su gerente, Samir Abudayeh, con Castillo.
La prensa peruana publicó más tarde un documento redactado por los fiscales en el que se denunciaba que se les había impedido acceder a las dependencias de la Oficina de Secretaría del Despacho Presidencial, algo que, más tarde, la Presidencia de Perú rechazó.
"(Castillo) dispuso que se otorguen las facilidades correspondientes para que los fiscales cumplan su labor con total apertura. En ningún momento se ha dado disposición alguna a efectos de que no se realicen diligencias en algunos ambientes del Palacio de Gobierno", señaló la Presidencia en un comunicado.
El caso se basa en las revelaciones del programa de televisión Panorama, de la cadena de televisión peruana Panamericana, que informaron de las reuniones de Castillo con Abudayeh y el presidente de PetroPerú, Hugo Chávez Arévalo, en el palacio presidencial y de la licitación para la compra de biodiésel que benefició a Abudayeh cuatro días después.
Las reuniones fueron confirmadas gracias a la información disponible en el portal de transparencia del Gobierno.
El mandatario solicitó que se levante su secreto bancario, tributario y de comunicaciones como muestra de su "total disposición" a que se le investigue en el caso.
"Como muestra de mi total disposición para colaborar con la Justicia, y en señal de transparencia, he solicitado de manera voluntaria el levantamiento de mi secreto bancario, tributario y de comunicaciones, una medida que no tiene precedentes", expresó Castillo en sus redes sociales.
"Rechazo de manera enfática haber participado en actos irregulares. Las puertas de Palacio están abiertas para apoyar toda medida que busque aclarar dudas", ha añadido Castillo en sus redes sociales.
Del mismo modo, ha informado de que ha acudido personalmente a la Fiscalía del país para pedir que se adelante su declaración testimonial al 28 de diciembre, pues su agenda oficial le imposibilita hacerlo el día 29, tal y como estaba previsto.
Con información de Télam