En un avance fundamental sobre lo que podría significar una cura en el mediano plazo, todos los voluntarios que recibieron la nueva vacuna experimental contra el coronavirus diseñada por Rusia presentaron indicios de inmunidad. Fue desarrollada por el Ministerio de Defensa ruso y el Centro Nacional de Investigación de Epidemiología y Microbiología Gamaleya.
Los voluntarios regresaron a la institución médica militar —donde se habían llevado a cabo los ensayos con humanos— al cumplirse el día 42 desde que recibieron la inyección. Tal como estableció el protocolo del proyecto, se sometieron a una revisación exhaustiva para evaluar su evolución.
"Los resultados de las revisaciones han demostrado con claridad la existencia de una evidente respuesta inmunológica obtenida como producto de la vacunación", aseguraron desde el Ministerio de Defensa.Además, indicaron que "no se ha detectado ningún efecto secundario o desviación en el funcionamiento del organismo de los voluntarios".
En ese sentido, los funcionarios rusos sostuvieron que estos datos permiten afirmar que esta vacuna contra el Covid-19 es segura. El sábado pasado, el ministro de Salud de Rusia, Mijaíl Murashko, ministro de Salud de Rusia, aseveró que se está preparando el paquete de documentos necesarios para registrar el medicamento.
Se prevé que la vacunación masiva de la población rusa empiece en octubre. Medios locales afirmaron que los primeros en vacunarse serán los integrantes de colectivos especiales como médicos y maestros.
Asimismo, Murashko reveló que existe otra vacuna, desarrollada por el Centro Estatal de Investigación en Virología y Biotecnología Véktor en Novosibirsk, está siendo sometida a ensayos clínicos. La semana pasada, el primer ministro de Rusia, Mijáil Mishustin, anunció que en el país 17 organizaciones científicas desarrollan más de 25 vacunas distintas contra el nuevo coronavirus. (Sputnik)