Por la crisis del coronavirus, España tendrá su "impuesto a las grandes fortunas"

"Son unos presupuestos progresistas y de país, absolutamente excepcionales por el contexto de pandemia y por el volumen de inversión pública que movilizan", afirmó el presidente Sánchez.

27 de octubre, 2020 | 08.34

El Gobierno de coalición de España, integrado por el Partido Socialista Obrero (PSOE) de Pedro Sánchez y la formación Unidas Podemos, cerró el proyecto de los Presupuestos Generales del Estado para 2021 tras pactar la subida de impuestos a rentas altas y una inversión pública récord.

"Son unos presupuestos progresistas y de país, absolutamente excepcionales por el contexto de pandemia y por el volumen de inversión pública que movilizan", afirmó el presidente Sánchez en una rueda de prensa conjunta con el vicepresidente y líder de Unidas Podemos, Pablo Iglesias, para presentar las claves del anteproyecto de ley de presupuestos.

El presidente del Gobierno español informó sobre las claves del plan para las cuentas públicas de España en 2021, que llega condicionado por las consecuencias económicas del coronavirus e incluye un adelanto de 27.000 millones de euros del fondo europeo para la reconstrucción tras la pandemia.



Se trata de unos presupuestos enfocados en los cuatro retos que acordó la coalición al entrar en el Gobierno en enero de 2020: la transición ecológica, la digitalización y la cohesión social y territorial del país.

Para ello, las cuentas prevén una inversión pública récord de 239.000 millones de euros –un 10,3 por ciento más– en una apuesta por "dejar atrás" los "recortes y la austeridad" y priorizar el gasto para "salir hacia adelante con energía", explicó Sánchez.

Este incremento irá dirigido principalmente a la Sanidad, con un 151 por ciento más de gasto, la Transición Ecológica, con 11.900 millones de euros para políticas verdes, y la Vivienda, con una subida de su cuantía del 367 por ciento.

También se aumentará en más del 70 por ciento la inversión en Educación, principalmente para becas y un impulso de la formación profesional.

Con esta apuesta progresista, el Gobierno español quiere focalizar sus esfuerzos en la reconstrucción del país tras la pandemia, pero también en otras metas como la modernización del modelo productivo y el fortalecimiento del estado del bienestar.

"Buscamos un crecimiento económico sobre bases más sólidas en un mundo post pandemia gracias a la mejora de la educación y la formación, la inversión en ciencia, la transformación ecológica y la digitalización", resumió el presidente Sánchez.

El PSOE y Unidas Podemos cerraron las negociaciones sobre el proyecto presupuestario tras alcanzar un pacto sobre una reforma fiscal que implica una subida de impuestos a rentas altas y grandes grupos empresariales.

Otro de los puntos acordados entre los socios de Gobierno tras meses de negociación es el compromiso de presentar en los próximos cuatro meses una ley para regular los precios del alquiler y "contribuir a hacer efectivo el derecho a la vivienda que recoge la Constitución", según destacó el vicepresidente Iglesias.

Era una de las condiciones que Unidas Podemos puso sobre la mesa para pactar los presupuestos, junto con la mejora de la gestión y la cobertura del recién creado Ingreso Mínimo Vital tras constatar que "muchas personas quedan fuera" de la ayuda.

"Inauguramos una nueva época que deja atrás la etapa neoliberal de la austeridad y los recortes y pone a nuestra patria en la senda que marca el acuerdo alcanzado en Europa, con la recuperación de derechos laborales y sociales y el refuerzo de lo público", subrayó el vicepresidente segundo de España.

Al proyecto presentado por ambos dirigentes se añaden medidas que salieron a la luz en los últimos meses como el incremento del impuesto sobre las bebidas azucaradas, el nuevo impuesto sobre los envases de plástico o el impulso a la fiscalidad medioambiental.