El presidente de Brasil, Jair Bolsonaro, protagonizó un papelón cuando confundió a un enano con un niño y lo alzó en sus hombros. El mandatario, que se recuperó hace pocos días del coronavirus, continúa manteniendo contacto estrecho en cada acto que realiza.
Todo ocurrió en Nioaque, ubicado al sudoeste del estado Mato Grosso, donde Bolsonaro inauguraba sin barbijo una termoeléctrica. En ese momento vio lo que pensaba que era un niño, al que levantó hasta sus hombros para sorpresa del resto de congregados.
Finalmente, un grito advirtió a Bolsonaro de que no se trataba de un niño sino de un enano. Acto seguido, el presidente lo dejó en el suelo y se marchó. El vídeo de inmediato se hizo viral en las redes sociales donde crearon memes.
Brasil no está para los bloopers de Bolsonaro. El gigante sudamericano se convirtió en el segundo país con más casos de coronavirus en el mundo, solo detrás de Estados Unidos. En las últimas 24 horas sumó 1.212 muertos, con lo que ya totaliza 111.100 fallecidos, mientras que el número de contagios confirmados sobrepasó los 3,45 millones, informó esta noche el Gobierno.
De acuerdo con el más reciente boletín del Ministerio de Salud, en la última jornada se reportaron 49.298 nuevos casos, con lo que el número de infectados subió a los 3.456.652.
Más 2.6 millones personas ya están recuperadas,unas 730.000 continúan bajo acompañamiento médico y otras 3.173 están aún en investigación.
El gigante sudamericano mantiene desde fines de mayo una situación relativamente estable pero con números "muy elevados", de acuerdo con los expertos, ya que el promedio diario es de unos mil muertos y de más de 40.000 casos de infectados.
La situación es heterogénea en una nación de más de 8,5 millones de kilómetros cuadrados y 210 millones de habitantes, donde predominan la variedad de condiciones climáticas, geográficas y socioeconómicas.
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