China tuvo que aumentar considerablemente el número de camas de sus hospitales. tras anunciar miles de nuevos contagios de coronavirus en el marco del rebrote que sufre por el avance de la variante Ómicron, que tiene a millones de personas confinadas en el país donde nació la pandemia.
China registró hoy 3.290 nuevos casos, 11 de ellos de gravedad. El número es inferior a los más de 5.000 casos de ayer, pero esta cepa identificada por primera vez en Sudáfrica a fines del año pasado, la más contagiosa de todas las conocidas, puso bajo enorme presión el sistema sanitario chino y su estrategia de cero covid que parecía encaminada a un resonante éxito.
El país previamente enviaba a todos los pacientes con síntomas a hospitales especializados. Pero ante el fuerte aumento de infecciones, que provocó el confinamiento de la ciudad sureña de Shenzhen, un centro tecnológico de 17,5 millones de habitantes, surgieron temores de una escasez de disponibilidad de camas de hospital.
En ese sentido, la Comisión Nacional de Salud dijo anoche que pacientes con casos moderados podrían permanecer aislados en un centro de cuarentena para aliviar la fuerte demanda sobre los hospitales. "Los pacientes con la variante Ómicron suelen ser casos asintomáticos y moderados, en su mayoría no requieren un tratamiento serio", indicó la autoridad sanitaria, que agregó que "Toda admisión a hospitales designados requerirá de muchos recursos médicos".
Hong Kong colapsa por el covid-19
Las imágenes de pacientes tendidos en camillas fuera de hospitales del territorio semiautónomo de Hong Kong, sobrepasados por el rebrote, preocupan al Gobierno, que apura la construcción de hospitales en algunas provincias.
Testimonios de la televisión estatal CCTV mostraron hoy decenas de grúas gigantes montando "hospitales temporales" en la provincia nororiental de Jilin, que refirió más de 5.000 casos en la última semana.
La provincia, de más de 24 millones de habitantes, dispone de solo 22.800 lechos de hospital.
Con información de Télam