La recuperación económica de la eurozona se ralentizó en diciembre debido a que el resurgimiento de las infecciones por el virus COVID-19 frenó el crecimiento del sector de los servicios, dominante en el bloque, según un estudio, y podría debilitarse aún más si se imponen restricciones más estrictas.
Cuando la variante del coronavirus ómicron se extendió rápidamente a finales del año pasado, los Gobiernos volvieron a imponer medidas para contener las tasas de infección, especialmente en Alemania, la mayor economía de Europa.
Por ello, el Índice Compuesto de Gerentes de Compras (PMI) de IHS Markit, un buen indicador de la salud económica general, cayó desde 55,4 en noviembre hasta 53,3 en diciembre, su nivel más bajo desde marzo.
Aunque la lectura final fue inferior a la estimación preliminar de 53,4, se mantuvo por encima de la marca de 50 que separa el crecimiento de la contracción.
"La expansión acelerada de la producción que vimos en noviembre resultó, por desgracia, breve. La propagación de la variante ómicron tuvo un impacto particularmente profundo en el sector de los servicios, reflejando una renovada indecisión entre los clientes", dijo Joe Hayes, economista senior de IHS Markit.
"A medida que los países de la zona del euro se enfrentan a los nuevos avances de la pandemia, está claro que los riesgos para la economía son ahora mayores, ya que es más probable que se impongan restricciones más estrictas para frenar la propagación del COVID-19".
El PMI que cubre la industria de los servicios cayó a un mínimo de ocho meses, de 53,1, desde el 55,9 de noviembre, por debajo de la lectura preliminar de 53,3.
El debilitamiento de la demanda y la amenaza de nuevas restricciones en el horizonte hicieron que las empresas de servicios aumentaran su plantilla al ritmo más lento desde mayo. El índice de empleo cayó desde 55,4 a 53,6.
El PMI de fábrica publicado el lunes, que mostró que la actividad manufacturera aguantó en diciembre, sugirió que la disminución de los cuellos de botella en la cadena de suministro había aliviado algunas presiones sobre los precios. [EUR/PMIM]
Sin embargo, el índice compuesto de los precios de los insumos se mantuvo elevado, en 74,1, aunque por debajo de los 76,0 de noviembre. El índice de precios de producción bajó, pero siguió siendo elevado.
"Aunque las presiones sobre los precios disminuyeron marginalmente, seguimos en territorio excesivamente caliente: los aumentos de los costes de los insumos y de la producción fueron los segundos más rápidos registrados", dijo Hayes, de IHS Markit.
Con información de Reuters
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