A partir del 1 de octubre los aficionados al deporte de España podrán llenar los estadios al aire libre hasta su capacidad máxima y las instalaciones cubiertas hasta el 80%, según informó el miércoles el Ministerio de Sanidad español.
Los aficionados tendrán que mantener una distancia de 1,5 metros entre ellos y llevar mascarilla, y se les permitirá beber agua pero no comer ni fumar.