El Gobierno de Biden planea comenzar a administrar las vacunas de refuerzo contra COVID-19 a los estadounidenses a partir de mediados o finales de septiembre, a la espera de la autorización de la Administración de Alimentos y Medicamentos de EEUU, dijo a Reuters a última hora del lunes una fuente familiarizada con las discusiones.
Los oficiales de salud de la administración del presidente de EEUU, Joe Biden, acordaron que la mayoría de las personas deberían recibir una vacuna de refuerzo ocho meses después de haber completado su vacunación inicial, dijo la fuente.
Según el New York Times, que ya había informado de la noticia, las autoridades tienen previsto anunciar la decisión de la administración esta misma semana, y es probable que los primeros refuerzos se apliquen a los residentes de residencias de ancianos y a los trabajadores sanitarios, seguidos de otras personas mayores.
La semana pasada, los organismos reguladores estadounidenses autorizaron una tercera dosis de las vacunas COVID-19 de Pfizer Inc y su socio alemán BioNTech SE y Moderna Inc para personas con sistemas inmunitarios comprometidos que probablemente tengan una protección más débil con los regímenes de dos dosis.
El objetivo de la administración es que quienes recibieron las vacunas de Pfizer-BioNTech o Moderna sepan que necesitarán protección adicional contra la variante delta del coronavirus, dijo el NYT.
El periódico añadió que las autoridades también esperan que los receptores de la vacuna de Johnson & Johnson, que fue autorizada como un régimen de una sola dosis, también necesitarán una dosis adicional.
Con información de Reuters
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