Desbloquearon un puente fronterizo en Canadá pero se intensifican las protestas en varios países

13 de febrero, 2022 | 18.59

(Agrega despeje del puente fronterizo en Canadá)

La policía de Canadá despejó hoy el puente Ambassador, fronterizo con Estados Unidos y bloqueado desde hacía varios días por manifestantes contra las restricciones sanitarias destinadas a combatir la propagación del coronavirus, mientras las protestas continuaban en buena parte del país, incluida la capital Ottawa, informó la prensa internacional.

Mientras tanto, se verificaron protestas por motivos similares en Francia -incluida una marcha que pretendía llegar mañana a Bruselas-, Australia y Nueva Zelanda, entre otros países.

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Un nutrido contingente de policías se desplegó esta mañana en los alrededores del puente Ambassador, arrestó a manifestantes, remolcó vehículos y despejó la ruta, en una operación que había comenzado en la mañana de ayer.

Sin embargo, hasta esta tarde las autoridades no habían precisado cuándo sería restablecido el tránsito, según la agencia de noticias AFP.

Dicho puente una la ciudad canadiense de Windsor, en la provincia de Ontario, con la estadounidense Detroit, en el estado Michigan, y es el paso fronterizo más transitado entre ambos países.

"No habrá tolerancia para la actividad ilegal", había advertido la policía de Windsor y pidió a la gente que evitara el área.

Más de 40.000 viajeros y camiones con mercaderías valuadas en 323 millones de dólares en promedio pasan por ese puente todos los días.

El operativo de desalojo se puso en marcha en virtud de una decisión del Tribunal Superior de Ontario, que ordenó asegurar la libre circulación por ese cruce y poner fin a un bloqueo que empujó a Washington a intervenir ante el gobierno canadiense, ya que generó trastornos en la industria automotriz en ambos lados de la frontera.

Según la televisora CBC, el tránsito en el puente aún no se había restablecido este mediodía.

La protesta en Canadá comenzó a fines de enero en Ottawa y está motorizada por camioneros que se oponen a tener que vacunarse contra la Covid-19, testearse o aislarse para poder cruzar la frontera con Estados Unidos.

Las movilizaciones de Canadá inspiraron iniciativas similares en otros países.

En Francia, la policía de París tuiteó que mantenía "el dispositivo este domingo" para impedir que los manifestantes, procedentes de todo el país, bloquearan la ciudad en su denominada protesta de "caravanas de la libertad".

Unos 300 vehículos con banderas francesas se plantaron en el estacionamiento de un centro comercial en las afueras de Lille, una ciudad cercana a la frontera con Bélgica. Algunos policías estaban presentes mientras seguían llegando vehículos.

"Iremos a Bruselas para intentar bloquear, para luchar contra esta política de control permanente", manifestó Jean-Pierre Schmit, un desempleado de 58 años de Toulouse, que se movilizó el sábado en París.

Unos 7.500 miembros de las fuerzas de seguridad francesas estaban movilizados, desde el viernes y hasta mañana, para cuando está previsto que las marchan lleguen a Bruselas, sede de muchas de las instituciones de la Unión Europea (UE).

En tanto, las autoridades belgas ya prohibieron cualquier manifestación motorizada para evitar "un bloqueo" de la ciudad.

A dos meses de las elecciones presidenciales en Francia, los manifestantes exigen la eliminación de la obligatoriedad del certificado de vacunas, que solo permite a las personas inmunizadas entrar en restaurantes, cines y otros comercios, y que el gobierno dijo que quiere suprimir para abril.

Protestas similares hubo en Países Bajos, Australia y Nueva Zelanda. En este último país, manifestantes antivacunas continuaban hoy acampando frente a la sede del Parlamento, en Wellington, a pesar del paso de un ciclón con vientos de hasta 130 kilómetros por hora, que causó apagones y evacuaciones en el país.

El viceprimer ministro, Grant Robertson, dijo a Television New Zealand que había un "elemento triste" en la protesta en la ciudad capital de Wllington, la cual entró hoy en su sexto día.

"Todo neozelandés tiene el derecho de protestar pacíficamente, el problema es que fueron mucho más allá de eso", comentó, informó la agencia de noticias AFP.

"Encuentro que la retórica de estas protestas es preocupante., hay un elemento triste, hay un elemento de teoría conspirativa que absorbió a la gente", señaló.

La policía detuvo la semana pasada a 122 personas en un intento de terminar la protesta, pero más bien reforzó la determinación de los manifestantes.

Con información de Télam