Alemania informó hoy una cifra récord de 80.430 nuevos contagios de coronavirus en medio del voraz avance de la pandemia en el país, mientras que el presidente, Frank-Walter Steinmeier, convocó a un debate para abordar la obligatoriedad de la vacunación, una medida que crece en respaldo político y ciudadano.
Con Alemania enfrentada aún a un pico provocado por la variante Delta del virus y a la espera de la llegada de la aún más contagiosa Ómicron, la agencia de control de enfermedades del país informó además 384 muertes por coronavirus en las últimas 24 horas.
El presidente de Alemania convocó hoy a un debate exhaustivo sobre los planes para vacunas obligatorias contra el coronavirus en el país, diciendo que una medida tan drástica debe justificarse ampliamente.
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El jefe de Gobierno alemán, el canciller Olaf Scholz, respaldó que se abra el debate sobre la vacuna obligatoria, que se espera que los legisladores comiencen a discutir a fines de este mes.
Las encuestas muestran que la mayoría de las personas en Alemania respaldan la obligatoriedad, pero una minoría vocal se opone a la idea.
"La situación excepcional de una pandemia aumenta la presión para que el Estado actúe, pero no reemplaza el requisito de sopesar argumentos y equilibrar intereses", dijo Steinmeier al comienzo de una mesa redonda con ciudadanos sobre la cuestión, informó la agencia de noticias alemana DPA.
El presidente, cuyo papel es en gran medida ceremonial, dijo que no tomaría partido en el debate, pero instó a los involucrados a tener "respeto por otras posiciones, pero también respeto por los hechos y la razón que deben ser y seguir siendo nuestra moneda común".
Sin embargo descartó "todas las afirmaciones sin sentido de que la pandemia de coronavirus ha convertido a Alemania en una dictadura", asegurando que tales acusaciones desprecian "nuestras instituciones democráticas y el estado de derecho".
Alrededor del 72,2% de los alemanes están "totalmente vacunados", mientras al menos el 44,2% recibió una vacuna de refuerzo adicional.
Entre los que se oponen a la obligatoriedad se encuentran algunos miembros del partido Demócratas Libres, que forman parte de la coalición gobernante.
Los líderes políticos acordaron permitir que los legisladores voten de acuerdo con su propia conciencia en lugar de seguir las líneas del partido sobre el tema.
Con información de Télam