La situación en Brasil por el coronavirus es lamentable y está a un paso de estallar. El mundo se preocupa por la actualidad de lo que ocurre en el país de Jair Bolsonaro porque hace peligrar a la salud mundial. En un solo día, ese país registró 90 mil casos, un récord absoluto, y 3.149 muertes por coronavirus (vale aclarar que, de ese total, 501 fallecidos que ayer no fueron registradas se incorporaron a este reporte).
Las diferentes cepas que atacan a Brasil han complicado mucho el panorama en esa región. Ante la impericia de Jair Bolsonaro, los números de Brasil han crecido de manera sumamente exponencial en las últimas semanas y ya hay temor porque está al borde del colapso hospitalario en las regiones más importantes.
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Los números fueron confirmados por el Ministerio de Salud y la situación está en el peor momento. Según se supo, Brasil registró el miércoles 90.303 casos y, con estos registros, ya son más 600 mil casos de COVID-19 en todo el país. Mientras tanto, el presidente Jair Bolsonaro sigue obviando las medidas de cuidad y no llama a tener restricciones en los peores lugares. Incluso, mantiene la idea de estar contra el uso del barbijo en todo el territorio.
Los portales de noticias sostienen que la situación ya es catastrófica. Por ejemplo, en los hospitales públicos, la ocupación de camas en el Estado de Sao Paulo es del 90,6%. Es decir, están al borde del colapso. Justamente, dentro de ese estado, hay 67 distritos que ya tienen las camas ocupadas al 100%. Por otro lado, en los últimos días también se supo que el sistema de Salud de Minas Gerais está en pleno colapso y ya hay, por lo menos, 200 personas esperando una cama UTI en el Estado. Por otro lado, Río de Janeiro, ayer batió récords de pedidos de internación en las camas UTI y se espera que prontamente también lleguen al colapso. En otros datos, por primera vez, el promedio de muertes por siete días ha pasado los dos mil casos.
Diferentes terapistas y asociaciones médicas largaron el día martes un informe en el cual sostienen que Brasil, directamente, está a un paso del colapso más grande de toda su historia. Incluso, nombraron a Rio Grande Do Sul, que está en una frontera con Argentina y Uruguay, que está al 100% de las camas ocupadas.
Mientras tanto, Jair Bolsonaro no adelanta ningún tipo de nuevas medidas para tratar de frenar el avance del COVID-19. Incluso, en las últimas horas volvió a cambiar a su ministro de Salud para tratar de frenar el avance de la enfermedad.
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