El gobierno alemán no logró su objetivo de vacunar al 80% de la población contra el coronavirus antes de fines de enero, aproximadamente un mes antes de que los legisladores voten sobre un proyecto de ley sobre las obligatoriedad de la inmunización contra el COVID-19.
Hasta el lunes, el 75,8% de los alemanes había recibido al menos una dosis de vacuna, lo que sitúa al país por detrás de pares europeos como Italia, Francia y España, según datos del Centro Europeo para la Prevención y el Control de Enfermedades. El portavoz del gobierno alemán, Steffen Hebestreit, no nombró un nuevo plazo para el objetivo del 80%, pero dijo que la meta era aumentar la tasa de vacunación en el futuro.
La semana pasada, los legisladores alemanes debatieron la vacunación obligatoria, que ha enfrentado resistencia entre políticos y el público en general. Las tres propuestas principales que se están considerando incluyen la vacunación obligatoria para todos los adultos o personas mayores de 50 años y el requisito de que todos aquellos que no hayan recibido ninguna vacuna reciban asesoramiento.
El número de casos de COVID-19 por cada 100.000 residentes durante siete días alcanzó un nuevo máximo en Alemania el lunes, subiendo a 1.176,8 desde los 1.156,8 del día anterior, mientras el país lucha contra una ola de infecciones con la variante del coronavirus ómicron.
La cifra se traduce en 78.318 nuevas infecciones reportadas en un día, dijo el Instituto Alemán Robert Koch (RKI) para enfermedades infecciosas. En total, hasta ahora se han confirmado más de 9,81 millones de casos.
El ministro de Salud alemán, Karl Lauterbach, quien se reunirá con los ministros de salud estatales más tarde el lunes, dijo que el número diario de nuevas infecciones podría aumentar a 400.000 debido a la variante ómicron.