La intervención del primer ministro israelí, Benjamín Netanyahu, en el Congreso de los Estados Unidos se dio en medio de protestas y boicots dentro y fuera del palacio legislativo. Mientras su ejército emprende una fuerte ofensiva sobre algunas zonas humanitarias en la Franja de Gaza y los mediadores intentan llevar adelante negociaciones para un alto el fuego, el mandatario volvió a solicitar más armas. La relación entre los aliados se tensionó en los últimos meses luego de que el presidente, Joe Biden, condicionara el envío de bombas. "Dennos las herramientas más rápido y terminaremos el trabajo más rápido", dijo.
“Después de casi 300 días, Netanyahu no ha logrado traer a los rehenes a casa y ha creado una catástrofe humanitaria: esta guerra debe terminar”, escribió en sus redes sociales la senadora demócrata Elizabeth Warren. “Lamento que la CPI aún no haya emitido una orden de arresto por sus crímenes de guerra, ya que con mucho gusto se la habría entregado en la Cámara”, sumó su correligionario de la Cámara de Representantes, Mark Pocan. “Benjamín Netanyahu debería comparecer ante un tribunal penal, no ante el Congreso de Estados Unidos”, sostuvo Joaquin Castro, también legislador oficialista. Fueron más de una docena de legisladores nacionales los que se negaron a asistir a la presentación del premier que llegó hace dos días al país del norte y que todavía no fue recibido por ninguna autoridad oficial.
"El presidente Biden y yo nos conocemos desde hace más de 40 años. Quiero agradecerle el medio siglo de amistad con Israel y por ser, como él dice, un orgulloso sionista", dijo y agregó que su Gobierno sigue "comprometido" a traer a todos los rehenes a casa, contrario a las denuncias que se hacen en su contra.
De hecho, según reportó Europa Press, ante los congresistas criticó la decisión de la Corte Internacional -que pidió a Israel garantizar la entrada de ayuda a la Franja de Gaza y cesar su ofensiva para no cometer un genocidio- al decir que es una "absoluta y completa tontería". "Hasta aquí esa mentira, pero aquí hay otra. El fiscal del tribunal acusa a Israel de atacar deliberadamente a civiles. ¿De qué diablos está hablando? El Ejército de Israel lanzó millones de folletos, envió millones de mensajes de texto y realizó cientos de miles de llamadas para sacar a los civiles palestinos del peligro", dijo sobre lo que en realidad son desplazamientos compulsivos que lleva adelante su ejército para poder avanzar con ataques en distintos puntos de la Franja de Gaza, muchos de ellos declaradas zonas humanitarias.
Más allá del repudio que se hizo visible tanto por representantes del oficialismo estadounidense, como por parte de diversas organizaciones y una masiva protesta en las afueras del Congreso, se animó a dejarles un mensaje: "Cuando los tiranos de Teherán, que cuelgan a los homosexuales de grúas y asesinan a mujeres por no cubrirse el cabello, los aplauden, promueven y financian, se habrán convertido oficialmente en los idiotas útiles de Irán", dijo Netanyahu.