El grupo Hezbollah confirmó el sábado la muerte de su líder, Sayed Hasán Nasrallah luego de que las Fuerzas de Defensa de Israel anunciaran su "eliminación" tras un nuevo bombardeo llevado adelante el viernes en la capital Beirut, en el marco del conflicto en Medio Oriente. "Hassan Nasrallah está muerto", adelantó vía Telegram el portavoz Nadav Shoshani. Horas más tarde, la organización libanesa hizo lo propio y confirmó la información brindada por Israel.
El ataque aéreo realizado por el ejército israelí fue durante el viernes, en los suburbios del sur de la ciudad capitalina. Más allá de anunciar su muerte, el movimiento afirmó a través de un comunicado que continuará su batalla contra Israel "en apoyo de Gaza y Palestina, y en defensa de Líbano y su firme y honorable pueblo". Seguido de ello, la cadena de televisión Al-Manar, perteneciente a Hezbollah, comenzó a emitir versículos del Corán tras el anuncio de la muerte de Nasrallah.
Quién era Hassan Nasrallah
Nasrallah nació en 1960, en el este de Beirut, y siempre estuvo unido a la política. Según indican medios locales, desde muy temprana edad buscaba y leía libros sobre el Islam. Después del estallido de la guerra civil, se unió al Movimiento de los Privados –una organización política creada en 1974, núcleo ideológico del partido libanés y rival de Hezbollah, Amal–; y si bien luchó con su milicia, todo cambió cuando en medio del conflicto Amal adoptó una postura incondicionalmente "antipática" hacia la presencia de milicias palestinas en Líbano. Por esto, en 1982 –poco después de la invasión israelí al Líbano–, decidió abandonar la organización.
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El político formó un nuevo grupo con apoyo iraní, que luego se convertiría en Hezbolá: en su visión del mundo, se dirigía a "los oprimos del Líbano" y nombraba como único líder verdadero al Líder Supremo, Ayatolá Jomeini de Irán.
Tras la creación de Hezbollah, la lucha contra Amal fue creciendo con el paso de los años y se disputaron, en numerosos enfrentamientos sangrientos –incluso finalizada la guerra civil–, el apoyo de los electores chiítas del Líbano. En 1992, cuando el movimiento libanés había vencido (en gran medida) a su rival, Nasrallah se convirtió en el tercer secretario general del grupo luego de que su predecesor Abbas al-Musawi fuera asesinado por misiles israelíes; tal como ocurrió con él, pero 32 años más tarde.
Poco a poco, Nasrallah se convirtió en una figura muy influyente para todas las naciones de Medio Oriente y presidió un cambio de época: con el dirigente como Secretario General, Hezbollah pasó de ser una organización externa a introducirse en la política libanesa convirtiéndose en un partido nacional que participaba en las elecciones democráticas. En 1992, puso al movimiento libanés en las urnas por primera vez y se convirtió en el jefe de Hezbollah durante más de 30 años, siendo "una de las personas más poderosas del Líbano a pesar de que nunca ocupó personalmente un cargo político" según indica Al Jazeera.
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Luego de alcanzar la cima de popularidad, tras la guerra con Israel en 2006, recibió importantes críticas por enviar combatientes a Siria para evitar un levantamiento contra el gobierno de Bashar al-Assad; razón por la cual, ya no era visto como el líder de un movimiento de resistencia sino como el líder de un partido chiíta que luchaba por los intereses iraníes.
Más allá de que el dirigente, recientemente asesinado, fuera descrito como "la personificación de Hezbollah", el grupo continúa altamente organizado y continuará con su enfrentamiento a Israel y su defensa a los pueblos de Palestina y Gaza, en conjunto con sus aliados del movimiento Hamás. "Es poco probable que Hezbolá se desmorone bajo el peso del asesinato de Nasrallah, pero con su muerte el grupo a perdido a un líder carismático y cuya influencia se extendió mucho más allá del Líbano", sentenciaron los medios locales. Ahora, deberán seleccionar un nuevo líder que deberá decidir la dirección del grupo libanés.
Con información de Reuters y Al Jazeera.
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