El gobierno de los Estados Unidos se sumó a la preocupación mundial frente al violento conflicto, con cohetes y misiles en la Franja de Gaza, entre Palestina e Israel. "Estamos extremadamente preocupados por los enfrentamiento en curso en Jerusalén, incluso en Haram al-Sharif, Monte del Templo y Sheikh Jarrah, que según informes han provocado decenas de heridos", afirmaron en un comunicado.
Al mismo tiempo, desde la gestión del presidente Joe Biden, manifestaron y condenaron los reiterados ataques: "No hay excusa para la violencia, pero ese derramamiento de sangre es especialmente perturbador ahora, ya que se produce en los últimos días del Ramadán". Mientras que, a su vez, lanzaron un pedido claro para ambos: "Hacemos un llamado a los funcionarios israelíes y palestinos para que actúen con decisión para reducir las tensiones y detener la violencia".
Con respecto al conflicto, en el comunicado publicado el 7 de mayo pasado piden que los dirigentes políticos "actúen con moderación" y "se abstengan de acciones y retóricas provocadoras". También exigieron que los líderes denuncien los actos violentos mientras que las fuerzas de seguridad "deben garantizar la seguridad de todos los residentes de Jerusalén" haciendo que los agresores rindan cuentas por su accionar bélico que ya se llevó muchas vidas.
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Con respecto a los ciudadanos y las ciudadanas de ambos territorios, desde Estados Unidos expresaron: "Nos preocupa profundamente el posible desalojo de familias palestinas en los barrios de Sheikh Jarrah y Silwan de Jerusalén, muchas de las cuales han vivido en sus hogares durante generaciones". Y agregan en el extenso comunicado: "Es fundamental evitar medidas que exacerben las tensiones o nos alejen más de la paz. Esto incluye desalojos en Jerusalén Este, actividad de asentamientos, demoliciones de viviendas y actos de terrorismo".
Desde EE.UU. dejan en claro que trabajan a la par de los líderes de ambos frentes, buscando reducir la situación. Mientras que, por otro lado, instan a que ejerzan un "liderazgo decisivo" y trabajen en conjunto, de forma cooperativa. Por último demandan a las autoridades que se acerquen a los residentes de las zonas más afectadas, "con compasión y respeto", considerando todos los casos a la hora de ayudar.
La preocupación desde Argentina
La Cancillería argentina hace unos días se manifestó días después, en la misma sintonía que la gestión de Biden, pidiendo el cese del fuego. "La República Argentina expresa su honda preocupación por el dramática agravamiento de la situación en Israel y Palestina, el uso desproporcionado de la fuerza por parte de unidades de seguridad israelíes ante protestas por posibles desalojos de familias palestinas de sus hogares así como por la respuesta a través del lanzamiento de misiles desde la Franja de Gaza", expresaron.
Al mismo tiempo, desde el gobierno del presidente Alberto Fernández condenaron "la escalada de violencia que causó numerosas víctimas fatales, cientos de heridos y trajo sufrimiento a la región" mientras que solicitaron a todos los actores "respetar plenamente sus obligaciones de conformidad con el derecho internacional, evitar acciones y declaraciones que escalen aún más la situación y proteger y respetar los derechos de las poblaciones".
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