El presidente de Colombia, Gustavo Petro, informó este martes que resolvió reincorporar a su país a la Unión de Naciones Suramericanas (Unasur) y que solicitó modificar el nombre de este grupo, luego de que al menos cinco naciones rehusaran reintegrarse a él.
"He decidido reintegrar el país a la Unasur, ratificando el tratado aprobado por el Congreso a través de ley", expresó Petro a través de Twitter, tras haber participado en Brasilia de la reunión de presidentes sudamericanos convocada por el presidente de Brasil, Luiz Inácio Lula da Silva. "He solicitado que (en adelante, la Unasur) se llame Asociación de Naciones Suramericanas, para garantizar el pluralismo y la permanencia en el tiempo", agregó el jefe del Estado colombiano.
El objeto de la reunión del martes era el de revivir la Unasur, desactivada en los últimos años luego de que se retirara de ella la mayoría de los países que la integraban. Sin embargo, la oposición de cinco países provocó que en la declaración final se expresara la voluntad de explorar cuál podría ser el mejor mecanismo de integración para la región, pero no se mencionara la Unasur.
Más temprano, en tanto, Petro propuso a sus pares sudamericanos la iniciativa de cambiar a nivel mundial deuda pública por acción climática para permitir que las potencias cooperen en forma efectiva con la lucha contra el cambio climático en los países de grandes selvas, como los amazónicos. "Hemos traído una propuesta a escala mundial hecha por Colombia, que es cambiar deuda pública por acción climática; este sería el salto hacia adelante en una verdadera lucha contra el cambio climático, principal problema de la humanidad", dijo a periodistas al llegar a la cumbre en Brasilia.
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En ese contexto, Petro sostuvo que una de las soluciones para la conexión eléctrica en la región sería el Grupo Isa, una empresa colombiana subsidiaria de la estatal petrolera Ecopetrol y que es la mayor compañía en kilometraje americano de cableado eléctrico.
La cumbre de presidentes debía demostrar, según Petro, que "América Latina tiene que jugar un papel unido, una voz unificada, porque tiene una gran potencialidad y tiene en sus manos, en su propio territorio, varias de las soluciones más importantes para la crisis integral que hoy vive la humanidad". "Esta reunión tiene que ver con clarificar ese papel, tratar de llegar a consensos y enfrentar los problemas del mundo; el discurso se está uniendo, pero no en proyectos concretos. Se trata de superar los problemas del mundo", agregó. En agosto, Petro y Lula se encontrarán en la ciudad de Belém en el marco de la reunión de la Organización del Tratado de Cooperación Amazónico, que incluye a ocho países.
Con información de Télam
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