Tensión diplomática y violencia contra migrantes en la frontera entre Chile y Perú

Hubo enfrentamientos y hay un herido. Como varias de las personas varadas son de Venezuela, el canciller de ese país solicitó respeto a los derechos humanos y garantías para su regreso.

29 de abril, 2023 | 17.41

La tensión fue in crescendo en las últimas semanas entre Chile y Perú. Para hacerle frente a la crisis migratoria que se vive en el norte chileno, el Congreso aprobó recientemente mayores facultades para que la Policía realizara controles de identidad. Por otro lado, la presidenta del Perú, Dina Boluarte, impuso el estado de emergencia y envió a las Fuerzas Armadas a la zona de la frontera. Este sábado, hubo enfrentamientos entre residentes peruanos y migrantes que prendían salir del país trasandino. Como muchas de las personas que buscan cruzar el país son venezolanas, el canciller de ese país solicitó garantía y respeto a los derechos humanos.

El hecho ocurrió cuando un importante grupo de manifestantes formado por residentes peruanos de la zona salió al choque de los migrantes, la mayoría de ellos de Venezuela y Haití, que protestaban cortando la ruta. El medio peruano RPP publicó un video en el que se ve a un hombre con una campera roja apoyado contra el guardar raíl justo antes de recibir el impacto de una piedra en su cabeza. Los carabineros de Chile auxiliaron de inmediato al hombre, que quedó tendido en el suelo por el impacto.

Mientras tanto, la Policía peruana formó una línea con escudos antidisturbios para hacer retroceder a los migrantes y desarmar la protesta que habían desplegado minutos antes cortando la ruta Panamericana Sur con sus equipajes y bolsas de basura para evitar la circulación. El bloqueo instalado cerca del complejo fronterizo de Santa Rosa duró varios minutos y provocó una retención de vehículos.

Cuando la Policía intervino para despejar la vía, algunos de los migrantes comenzaron a insultar y a lanzar piedras a los agentes, que lograron hacerlos retroceder hasta territorio chileno; por lo que también tuvieron que intervenir miembros de carabineros. El Ejército peruano envió efectivos a la zona, pero por el momento no intervinieron y se mantienen a un kilómetro del lugar. Ante esta situación, el ministro del Interior peruano, Vicente Romero, dijo al medio local RPP que solo permiten el ingreso a las personas que tengan documentación "si no la tienen, no pueden ingresar a Perú".

Un corredor humanitario

Romero, en tanto, informó que con las autoridades chilenas han estado evaluando la posibilidad de abrir un corredor humanitario para capear la crisis en la frontera, algo para lo que necesitan la autorización de Venezuela. En ese sentido, el ministro de Defensa de ese país, Jorge Chavez, dijo a RPP que "se está trabajando para poder lograr la intervención de un actor muy importante que tiene que ser Venezuela para que autorice el regreso de ciudadanos".

En respuesta a esto, se expidió el canciller venezolano, Yvan Gil: "En relación a la situación de migrantes venezolanos bloqueados en la frontera entre Chile y Perú, hemos estado en contacto con ambas cancillerías y solicitado plenas garantías y respeto a los DDHH de nuestros compatriotas", escribió en su cuenta de Twitter. Además, informó que solicitaron garantías para que los aviones de Conviasa puedan aterrizar y despegar en la zona, así como abastecer combustible en un eventual operativo de nuestro Plan Vuelta a la Patria que nos permita regresar sanos y seguros a nuestros compatriotas.

Al mismo tiempo, la organización Amnistía Internacional ya se había expedido sobre el tema el jueves pasado cuando llamó a los gobiernos de Chile y Perú a poner fin a la militarización de sus fronteras y acusó a los presidentes de ambos países de decretar “políticas crueles y deshumanizadoras que violan las normas internacionales” para la protección de migrantes y refugiados. AI estimó que al menos 300 personas, la mayoría de ellas de nacionalidad venezolana y haitiana, se encuentran varadas en la frontera entre ambos países “en una situación humanitaria crítica, sin alimentos, agua, alojamiento o asistencia sanitaria en el desierto conocido por sus condiciones extremas”. 

Las Naciones Unidas se proclamaron este viernes: "Nuestros colegas advierten que entre las personas más vulnerables hay familias separadas, niños y adolescentes no acompañados, y también personas con enfermedades críticas y crónicas. Las dos agencias de la ONU están reforzando su presencia en la zona", dijo en rueda de prensa el portavoz de la ONU, Stéphane Dujarric.

"Lo fundamental, en primer lugar, es que los dos países aborden la situación a través del diálogo, manteniendo en el centro el bienestar de los seres humanos que son refugiados, que son migrantes, hay que respetar su dignidad. Hay que respetar los derechos de los solicitantes de asilo y de los refugiados. Y nosotros estamos ahí para garantizar que tengan las necesidades más básicas que necesiten, pero este es un asunto que tendrá que tratarse directamente entre los dos países", exigieron.

Crisis migratoria

Los gobiernos de la región intentan encontrar una solución para los migrantes, en su mayoría haitianos, venezolanos, colombianos y ecuatorianos, que dejaron Chile en las últimas dos semanas tras el endurecimiento de los controles migratorios. Perú les impide el paso alegando falta de documentación y hasta dispuso esta semana el estado de emergencia por 60 días en sus fronteras y la militarización para reforzar la vigilancia. Ante el bloqueo, las y los migrantes decidieron pasar por pasos irregulares hacia la ciudad fronteriza peruana de Tacna y otros se instalaron del lado chileno, en Arica.

El jueves pasado, el alcalde de Tacna, Pascual Güisa, criticó al presidente chileno Gabriel Boric, al que acusó de "trasladar los problemas a la frontera", declaraciones que respondió a las pocas horas la ministra del Interior de Chile, Carolina Tohá, quien afirmó que sus dichos "no contribuyen a hacer frente a la crisis de la frontera". 

La situación generó un roce diplomático bilateral: el Gobierno chileno presentó una "nota diplomática de protesta" ante Perú y la Cancillería peruana citó al embajador chileno en Lima para "expresarle su protesta por la falta de colaboración" de la Policía chilena.