La Internacional Progresista, una organización que engloba a progresistas activistas y organizaciones de distintas partes del mundo, denunció lo que consideró como ataques del presidente de Brasil, Jair Bolsonaro, a la democracia a través de un documento firmado por cientos de prominentes figuras políticas. También, alertaron sobre un posible golpe de Estado, justo antes de la marcha oficialista que se celebrará mañana contra el Supremo Tribunal de Justicia (STJ) que investiga al mandatario.
"Nosotros, representantes electos y líderes de todo el mundo, encendemos la alarma: el 7 de septiembre de 2021, una insurrección pondrá en peligro la democracia en Brasil", alertó el documento de la Internacional Progresista.
El texto, al que adhirieron entre otros los expresidentes José Luis Rodriguez Zapatero, Fernando Lugo, Ernesto Samper y Rafael Correa -de España, Paraguay, Colombia y Ecuador, respectivamente- denunció que la marcha convocada por "grupos de supremacistas blancos, la policía militar y funcionarios públicos" enciende el temor en la región a un golpe de Estado "en la tercera democracia más grande del mundo".
"El presidente Bolsonaro ha intensificado sus ataques en contra de las instituciones democráticas de Brasil en las últimas semanas", alertaron al tiempo que ejemplificaron el desfile militar que encabezó el presidente en el Congreso así como las medidas electorales que se tomaron dentro del poder legislativo cuando el sistema electoral brasileño era conocido como "uno de los más confiables del mundo". En este sentido, agregaron que "Bolsonaro y su Gobierno han amenazado con cancelar las elecciones presidenciales de 2022 si el Congreso no aprueba estas reformas".
Entre los centenares de adherentes se cuentan también intelectuales como Noam Chomsky y parlamentarios como el griego Yanis Varoufakis, el británico Jeremy Corbyn, el francés Jean-Luc Melenchon, el colombiano, Gustavo Petro, además del candidato presidencial chileno, Marco Enríquez Ominami, la estadounidense Naomi Klein, el excandidato presidencial brasileño Fernando Haddad, entre otros.
Hacia el final del documento, los dirigentes precisaron que el presidente "convoca a sus seguidores a viajar a Brasilia el 7 de septiembre en un acto de intimidación a las instituciones democráticas del país". Según un mensaje compartido por el propio Bolsonaro el 21 de agosto, la marcha es en preparación para un "contragolpe necesario contra el Congreso y la Corte Suprema".
Bolsonaro convocó a una manifestación y maximiza la tensión
Este martes 7 de septiembre, día de la fiesta nacional brasileña, el presidente ultraderechista pensó una jornada de alta tensión con manifestaciones para amedrentar al Poder Judicial en el peor momento de su popularidad como primer mandatario. En las principales ciudades, sobre todo en Sao Paulo y Brasilia, se desplegarán importantes dispositivos de seguridad para evitar enfrentamientos en las celebraciones de la independencia, ya que que ese mismo día hay convocadas también marchas contra el mandatario.
"Llegó la hora de decir el día 7 que nos volvimos independientes (...) para decir que no aceptamos que alguien en Brasilia quiera imponer su voluntad", exclamó Bolsonaro durante un discurso la semana pasada. Era una clara alusión a los jueces de la Corte Suprema y del Tribunal Superior Electoral contra los cuales está en pie de guerra desde hace semanas después de que estos abrieran varias investigaciones contra él y su entorno, entre otras cosas por difundir informaciones falsas.
El viernes, Bolsonaro quien antes de llamarse Presidente se llama "Capitán del Ejército brasileño", fue todavía más allá y dijo que las protestas serán un "ultimátum" para los jueces de la máxima corte. El sábado citó la posibilidad de una "ruptura" institucional.
Por su parte, el presidente de la Corte Suprema, Luiz Fux, compartió recientemente su preocupación por el tono beligerante del presidente y sus fervientes seguidores. "En una democracia, las manifestaciones son pacíficas y la libertad de expresión no debe ser sinónimo de amenazas o de violencia", expresó.