El Congreso español condenó hoy el intento de golpe de Estado ocurrido el 8 de enero con el asalto a las instituciones brasileñas por parte de seguidores del expresidente Jair Bolsonaro, al tiempo que mostró su apoyo al presidente Luiz Inácio Lula da Silva.
El partido de extrema derecha Vox se abstuvo en la votación de la "proposición no de ley", que fue llevada al Congreso por el partido socialista PSOE del presidente del Gobierno español, Pedro Sánchez, que gobierna junto al partido de izquierda Unidas Podemos.
En la exposición de motivos del texto aprobado se establece un paralelismo entre lo ocurrido en Brasilia el mes pasado y el asalto a la sede del Congreso estadounidense por parte de seguidores del expresidente Donald Trump de enero de 2021.
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Se resalta que ambos episodios responden "a una estrategia trazada por los movimientos populistas y de extrema derecha a nivel global" de poner en tela de juicio las instituciones del Estado cuando pierden una elección.
Así, excepto Vox, todos los grupos del Congreso condenaron "rotundamente" el "golpe contra la democracia" que supuso el ataque a la casa de gobierno, el Congreso y la corte suprema del 8 de enero en Brasilia, informó la agencia de noticias Europa Press.
Durante el debate de la moción, esta semana, legisladores del PSOE y de Unidas Podemos vincularon a Vox con Bolsonaro y el intento de golpe de Estado y alertaron del riesgo que suponen las estrategias de deslegitimación de los gobiernos.
Diputados de Vox rechazaron las afirmaciones y dijeron que tanto el partido como Bolsonaro condenaron los sucesos en Brasil.
En el texto aprobado hoy, el Congreso mostró "su apoyo y compromiso con las instituciones democráticas de Brasil" y hacia Lula, "elegido democráticamente gracias a la voluntad del pueblo brasileño el 30 de octubre de 2022", según remarcó la iniciativa.
El texto incluye un tercer punto con el que el Congreso deja expresado "su compromiso con el fortalecimiento de la democracia y la legitimidad de las instituciones en cualquier sistema democrático" e insta "a todas las fuerzas parlamentarias a condenar sin ambages el asalto a las instituciones de Brasil".
El Parlamento Europeo, el órgano legislativo de la Unión Europea (UE), ya se había pronunciado en repudio de la toma de las tres sedes en Brasilia 11 días después de los hechos.
En una resolución no vinculante aprobada por 319 votos a favor, 46 en contra y 74 abstenciones, los eurodiputados pidieron el 19 de enero de forma explícita a Bolsonaro y sus partidarios "aceptar el resultado democrático de las elecciones" de octubre.
A raíz de los ataques en Brasilia, más de 1.000 personas fueron detenidas.
Bolsonaro abandonó el país el 30 de diciembre y se instaló en Estados Unidos, donde aún se encuentra. Esto evitó que entregara el mando a su sucesor Lula el 1 de enero.
Con información de Télam
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