El presidente de Brasil, Luiz Inácio Lula da Silva, fue sometido el martes a una tomografía computarizada que mostró "mejoría progresiva compatible con su excelente estado", de acuerdo a un parte médico del hospital Sirio-Libanés en el marco del seguimiento sobre su salud tras ser sometido a dos cirugías en la cabeza. Según informaron los médicos, "la tomografía muestra reabsorción significativa de la colección subdural, con mejoría progresiva consistente con el excelente estado del presidente".
En el comunicado, también precisaron que sigue bajo el acompañamiento del equipo médico liderado por Roberto Kalil Hijo y la doctora Ana Helena Germoglio.
El 9 de diciembre, Lula, de 79 años, debió ser trasladado de urgencia desde Brasilia a San Pablo para ser operado de urgencia para drenar un hematoma en el cráneo, resultado de un accidente doméstico ocurrido en octubre, cuando se cayó en el baño del Palacio de la Alvorada y se golpeó la cabeza.
A mediados de mes, fue sometido a un procedimiento complementario para evitar nuevas hemorragias en la zona.
El postoperatorio
El pasado 15 de diciembre, los médicos explicaron que durante los 15 días siguientes el presiente debía "tener más cuidado", pero que su "capacidad cognitiva está perfecta". "Puede retornar a sus actividades normales, tener reuniones, pero con coherencia. El presidente sabe que no puede hacer ejercicio físico. Caminar sí, pero paseando, no como ejercicio", afirmó el médico Roberto Kalil.
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De hecho, durante su internación el mandatario habló con varios integrantes de su gabinete y hasta firmó la sanción de la ley que crea el mercado de carbono en Brasil, que fue publicada en el Boletín Oficial esta mañana antes de la operación complementaria que le realizaron. La normativa autoriza al Estado nacional a establecer límites para la emisión de gases de efecto invernadero en el país, crea reglas para el mercado y será aplicado a actividades que producen anualmente por encima de 10 mil tCO2e (toneladas de dióxido de carbono equivalente).
Más allá del incidente que sufrió y que lo llevó a hospitalizarse, más de una vez Lula dijo que tiene “70 años, la energía de 30 y la pasión de 20” y hasta barajó la posibilidad de ir por un cuarto mandato en las elecciones presidenciales 2026.