La Policía Federal y la Justicia brasileña amontonan cada día más pruebas contra el expresidente Jair Bolsonaro por la tentativa de golpe de Estado. Tras un megaoperativo para investigar el rol de militares, ministros y del mismo exmandatario, reconfirmaron la tesis sobre la que vienen trabajando desde enero pasado cuando miles de bolsonaristas ocuparon la sede de los Tres Poderes en Brasilia: hubo una tentativa de “garantizar la mantención del entonces presidente en el poder”, dijeron y hallaron la confección de un decreto con medidas para impedir la posesión del actual jefe de Estado, Luiz Inácio Lula da Silva.
De acuerdo a la información difundida por la BBC brasileña, el ministro de la Corte Suprema de Justicia, Alexandre de Moraes, afirmó que la Policía Federal obtuvo evidencias de que:
- Bolsonaro estuvo envuelto en la confección de un decreto con medidas para impedir la posesión de Lula para mantenerse él en el poder;
- Que militares tenían organizadas manifestaciones contra el resultado de las elecciones y actuaron para garantizar que los manifestantes bolsonaristas tuvieran seguridad;
- El grupo cercano a Bolsonaro tenía monitoreado los pasos del juez Morales, de la Corte, inclusive, tenían acceso a su agenda de forma anticipada. A principio de año, en una entrevista televisiva, él mismo contó que los grupos golpistas tenían entre sus planes secuestrarlo y asesinarlo.
La operación de la Policía llamada Tempus Veriatis –que significa “hora de la verdad”-, es parte de la trama de investigaciones que llevan adelante hace más de un año en la que buscan dar con autores materiales como intelectuales de la tentativa de golpe del 8 de enero de 2023, así como de los propios financistas.
En ese contexto, la Policía informó que durante la jornada de este jueves llevaría adelante 33 allanamientos y la Justicia decidió retener el pasaporte de Bolsonaro para impedir su salida del país. También, colocaron sobre él la posibilidad de hacer contacto con otros investigados.
Durante la jornada, el diario paulista Folha, lo entrevistó y apeló a la victimización a pesar a de las pruebas: “Salí del gobierno hace más de un año y sigo sufriendo una persecución implacable. Olvídenme, ya hay otro gobernando el país”, dijo el exmandatario que nunca reconoció el triunfo de su contrincante y sobre el que, además, fue declarado “inelegible” hasta 2030 por el Tribunal Electoral.
"En esta etapa, las investigaciones indican que el grupo investigado se dividió en conjuntos de acción para difundir la denuncia de fraude en las elecciones presidenciales de 2022, incluso antes de que se llevaran a cabo los comicios, con el fin de habilitar y legitimar una intervención militar, en una dinámica de milicia digital", dice el comunicado policial.
Además, según dio a conocer la prensa brasileña, al menos, unas nueve personas del entorno bolsonarista fueron detenidas, entre ellas: el coronel Marcelo Cámara, exsecretario de Bolsonaro; y el exasesor especial en asuntos internacionales Filipe Martins, conocido por su reivindicación de los movimientos de la extrema derecha de Estados Unidos; y el mayor del Ejército Rafael Martins de Oliveira, que actuó en el batallón de fuerzas especiales. En las últimas horas, además, se confirmó la detención del presidente del Partido Liberal, Valdemar Costa Neto, acusado de portación ilegal de armamento cuando su domicilio fue allanado.
La trama golpista fue encontrada a mediados del año pasado y revelada por la revista Veja. Fue hallada en el celular del exedecan de Bolsonaro, Mauro Cid.
La policía pudo corroborar que esta minuta del golpe fue entregada a Bolsonaro por Filipe Martins y el abogado Amauri Feres –que es buscado- a quienes el expresidente habría solicitado que se mantuviera el pedido para la realización de nuevas elecciones, informó G1. También, identificaron que los vuelos de Moraes eran monitoreados por los golpistas que para el magistrado tuviera una custodia permanente en caso de que se concretara el golpe, así podía ser detenido.
El exedecan también apareció en este caso: según los efectivos afirmó en un audio que tenía un hacker en busca de una “bala de plata” que sustentase el golpe de Estado.
Otro texto similar había sido encontrado en la casa del exministro de Justicia, Anderson Torres. Lo que resta saber es si ambas tienen el mismo origen o no.
Los argumentos para declarar el estado de sitio
Durante los allanamientos de la jornada en la sede del PL, la policía encontró un documento no firmado con argumentos para decretar el estado de sitio. En G1 precisaron que sería parte de un discurso que sustenta la ruptura del Estado democrático de derecho y estaría “dentro de las cuatro líneas de la Constitución”, expresión usada generalmente por Bolsonaro en actos públicos.
“Después de todo, en vista de todo lo anterior, y para garantizar el necesario restablecimiento del Estado Democrático de Derecho en Brasil, jugando incondicionalmente dentro de las cuatro líneas, con base en disposiciones expresas de la Constitución Federal de 1988, declaro el estado de sitio y, como acto continuo, decreto el funcionamiento de garantizar el orden público”, cierra el documento.