El primer ministro israelí, Benjamín Netanyahu, visitó el lugar en donde en la noche del viernes un hombre asesinó a balazos a las personas que salían de una Sinagoga, en el este de Jerusalén. El hecho, por el momento, dejó siete personas fallecidas y diez heridas. “Estamos tras uno de los peores ataques que hemos conocido en los últimos años”, declaró el premier ante la prensa luego de una evaluación de la situación con las agencias de seguridad. En la jornada del jueves, Israel bombardeó un campamento de refugiados bastión de milicianos de la resistencia palestina, en Jenin, Cisjordania, y mató a nueve personas.
Un comunicado difundido por el Gobierno israelí informó que Netanyahu se solidarizó con las familias de las personas asesinadas y les deseó una pronta recuperación a las heridas. “Quiero elogiar a los policías que acudieron y actuaron rápidamente, con valentía y con un ingenio excepcional. Llegaron en minutos, desafortunadamente, incluso los minutos a veces son demasiado tarde”, dijo Netanyahu y dio a conocer que decidieron “acciones inmediatas”.
“Mañana, al final de Shabat, convocaré al gabinete de seguridad para discutir sobre los pasos a seguir”, indicó e instó a que las personas no tomen justicia por mano propia: “Para eso tenemos un ejército, una policía y fuerzas de seguridad, y actúan y actuarán de acuerdo con las instrucciones del gabinete”. El hombre que disparó fue asesinado por la policía que llegó al lugar en el momento.
Después de la evaluación de la situación dirigida por el mandatario, el Jefe de Estado Mayor del ejército israelí ordenó el refuerzo de las fuerzas militares en la zona de Cisjordania y la preparación para una posible escalada de ataques terroristas en la región.
“La organización Hamas bendice el atentado perpetrado esta tarde por el terrorista Khairy Alkam”, dice un comunicado de la organización. Para Hamas, la acción es "una respuesta natural a la masacre en Jenin, una respuesta a la profanación de la Mezquita Al-Aqsa y a la escalada de crímenes y agresiones contra el pueblo palestino". Allí, afirmaron, además, que el ataque es "un mensaje al Gobierno de ocupación de que no será posible doblegar la voluntad del pueblo palestino de continuar la resistencia".
Hamas también declaró que "los palestinos seguirán atacando al enemigo, y la resistencia seguirá siendo la elección del pueblo palestino hasta la liberación de su tierra y la realización de todos sus derechos nacionales".
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