Israel y Líbano alcanzaron hoy un acuerdo "histórico" mediado por Estados Unidos para resolver una vieja disputa sobre sus fronteras marítimas que permitirá la explotación de recursos gasísticos en el mar Mediterráneo y abrirá una nueva etapa para ambos países, que técnicamente siguen en guerra.
Aunque la negociación sufrió varios reveses desde su lanzamiento en 2020, logró avances en las últimas semanas ante el interés de ambas partes de obtener ingresos de los yacimientos marítimos.
El acuerdo fue anunciado hoy por el primer ministro israelí, Yair Lapid, sin dar detalles sobre el contenido.
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"Israel y Líbano alcanzaron un acuerdo histórico que resuelve la disputa marítima", dijo en un comunicado Lapid, que lo definió como "un hito histórico que reforzará la seguridad de Israel".
Más temprano, el líder negociador de Israel, Eyal Hulata, había adelantado que todas las demandas israelíes fueron "satisfechas".
"Los cambios que pedimos fueron corregidos. Protegimos los intereses de seguridad de Israel y estamos en camino de un acuerdo histórico", aseveró.
El acuerdo será presentado mañana al consejo de seguridad de Israel y después al conjunto del Gobierno y del Parlamento, que debe pronunciarse, reportó la agencia de noticias AFP.
También la presidencia de Líbano había dicho que la propuesta final enviada por el representante estadounidense Amos Hochstein era "satisfactoria" y señaló que esperaba anunciar "lo antes posible" los límites acordados.
El anuncio se produce cuando faltan 20 días para el fin del mandato del presidente libanés, Michel Aoun, una fecha que coincide con las legislativas israelíes del 1º de noviembre, que podría implicar el retorno al poder de Benjamin Netanyahu con sus aliados ultraortodoxos y de extrema derecha.
"No se trata de un acuerdo histórico, sino de una capitulación histórica", opinó Netanyahu en una declaración en directo en Facebook, tras conocer el acuerdo.
El dirigente opositor acusó al Gobierno de Lapid de haber cedido al movimiento armado libanés Hezbollah y su líder Hassan Nasrallah.
"No lo hicimos ni vamos a ceder ni un milímetro que se considere crítico para nuestra seguridad", replicó el ministro de Defensa israelí, Benny Gantz.
El funcionario saludó, en cambio, la decisión del Líbano de apoyar un acuerdo "positivo para ambas partes" pese a las amenazas de Hezbollah de torpedearlo.
También el presidente estadounidense, Joe Biden, felicitó a ambas partes por al acuerdo alcanzado con la mediación de su país, que calificó de "avance histórico".
"Los gobiernos de Israel y Líbano acordaron poner fin formalmente a su disputa sobre la frontera marítima", dijo Biden en un comunicado publicado por la Casa Blanca.
"Ahora es fundamental que todas las partes mantengan sus compromisos y trabajen para su implementación", agregó el mandatario, quien consideró que la energía debe ser una herramienta para la "cooperación, estabilidad, seguridad y prosperidad" en la región y no una fuente de "conflicto".
Estados Unidos mediaba desde hace dos años entre estos vecinos sin relaciones diplomáticas para resolver la disputa fronteriza en una zona del Mediterráneo rica en recursos gasísticos.
Su enviado presentó una propuesta a principios de mes, que pareció recibirse con buenos ojos por ambas partes.
El pacto pareció quebrarse después de que Israel rechazara las enmiendas introducidas por Beirut, pero las negociaciones continuaron hasta sellar el acuerdo final.
Según informaciones de prensa y de responsables de la negociación, la propuesta prevé dejar bajo control israelí el yacimiento de Karish y conceder a Líbano el campo de gas de Qana, situado más al noreste.
Sin embargo, una parte de este yacimiento superará la línea fronteriza entre ambos países, con lo que Israel se llevaría parte de los beneficios de la explotación, indicaron estas fuentes.
En un contexto de escasez de gas en Europa por la invasión de Ucrania, Israel quiere empezar cuanto antes la explotación en Karish para exportar hacia el Viejo Continente.
El domingo, la empresa británica Energean empezó las pruebas para conectar este yacimiento mar adentro con Israel, una etapa clave para comenzar la actividad.
Con información de Télam