La Policía Federal encontró en la casa del ex ministro de Justicia bolsonarista, Anderson Torres, el borrador de un decreto que buscaba permitir cambiar el resultado de las elecciones en las que Luiz Inácio Lula da Silva resultó vencedor. Según dio a conocer el diario Folha do Sao Paulo, el texto de tres páginas fue hallado en una computadora guardada en un armario en el marco de la investigación de la toma de los tres poderes del Estado del pasado domingo en Brasilia, mientras Anderson oficiaba de secretario Seguridad Pública de Brasilia a la distancia, ya que estaba de vacaciones cuando sucedieron los hechos. En sus redes sociales Torres sostuvo que se construyen “narrativas falsas” en su contra.
El texto, según el diario, era un borrador de decreto que hubiera permitido que Bolsonaro instaurase el "estado de defensa", un régimen de excepción, con el objetivo de intervenir el Tribunal Superior Electoral (TSE) y revertir el resultado de las elecciones de la segunda vuelta realizadas el pasado 30 de octubre, en las que el ex mandatario derechista obtuvo el 49,1 % de los votos, frente al 50,9 % de Lula.
Según la Constitución, explicó Folha, el decreto del estado de defensa sirve para “preservar o restablecer prontamente, en lugares restringidos y determinados, el orden público o la paz social amenazados por inestabilidad institucional grave e inminente o afectados por calamidades de gran magnitud en la naturaleza”. A diferencia del estado de sitio —que necesita ser validado por el Congreso para entrar en vigor—, la declaración del estado de defensa surte efectos inmediatos.
Luego de los comicios, Bolsonaro demoró más de 24 horas en hablar ante la prensa y, cuando lo hizo, reconoció a duras penas la derrota por parte del líder del Partido de los Trabajadores. Para más, se fue de viaje a Estados Unidos en la víspera del traspaso de mando y rompió con la tradición de colocar la faja presidencial a su sucesor. Desde Estados Unidos, además, publicó un video, que luego borró, con mentiras sobre el funcionamiento de las urnas electrónicas.
Una semana después de la asunción de Lula, seguidores del ex presidente de ultraderecha atacaron el Planalto, el Tribunal Supremo de Justicia (Corte Suprema) y el Congreso con el objetivo declarado de derrocar a Lula.
Torres, luego de participar en la gestión bolsonarista como ministro, asumió su cargo como secretario de Seguridad Pública en el gobierno regional de Brasilia, pero cinco días después, decidió tomarse vacaciones, también, en Estados Unidos. La Justicia, entonces, decidió investigar sus responsabilidades por no haber adoptado las medidas necesarias para frenar el ataque y la Corte Suprema dictaminó su detención preventiva. El mismo día del ataque fue destituido por el entonces gobernador, Ibaneis Rocha, otro aliado de Bolsonaro, que más tarde fue separado del Gobierno de la capital brasileña durante noventa días, también ante la inoperancia para frenar la llegada de los bolsonaristas a las instituciones estatales.
Para hacer frente a la situación y poder actuar, Lula decretó la intervención federal en el área de seguridad pública de la capital del país y, este jueves, afirmó que miembros de la Policía y de las Fuerzas Armadas fueron conniventes con los actos golpistas.
"Quiero ver los videos grabados dentro de la Corte Suprema, dentro del Palacio. Hubo mucha gente connivente. Hubo muchos miembros de la Policía conniventes, muchos miembros de la Fuerzas Armadas aquí dentro conniventes", aseguró el líder petista en un desayuno con periodistas. Por el ataque a la democracia perpetrado por bolsonaristas se cuentan ya unas 1500 personas detenidas y se encuentran abiertas investigaciones contra políticos y empresarios acusados de financiarlos.
Torres dijo que fue "sacado de contexto"
Luego de que Folha diera a conocer el detalle de la documentación encontrada en la residencia de Torres, el ex ministro y ex secretario se pronunció en las redes sociales. Según dijo, el borrador fue “filtrado fuera de contexto” y ayuda a “alimentar narrativas falaces”.
"Había en mi casa una pila de documentos para descarte, donde muy probablemente encontraron el material descrito en el reportaje. Todo sería llevado para ser triturado oportunamente en el Ministerio de Justicia", dijo Torres en su cuenta de Twitter. Además, subrayó que "el citado documento fue incautado" cuando él no se encontraba en casa "y filtrado fuera de contexto, ayudando a alimentar narrativas falaces" contra él.
"Respeto la democracia brasileña. Tengo mi conciencia tranquila en relación a mi actuación como ministro", agregó Torres.