El inculpado por el mayor ataque antisemita de la historia de Estados Unidos, que dejó 11 muertos en una sinagoga hace cinco años, comenzó a ser enjuiciado hoy y se expone a recibir la pena de muerte, informó la prensa internacional.
Robert Bowers, de 50 años, está acusado de abrir fuego dentro de la sinagoga Tree of Life, en Pittsburgh, Pensilvania, el 27 de octubre de 2018.
Sin embargo, la defensa de Bowers alega que sufre esquizofrenia y pidió infructuosamente a la fiscalía permutar la ejecución por cadena perpetua.
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Los 12 miembros del jurado comenzaron a escuchar los alegatos y el juicio probablemente se extenderá hasta julio.
Antes del ataque, Bowers había manifestado en la web fuertes expresiones antisemitas.
El entonces presidente Donald Trump abogó por sentenciarlo a muerte y la fiscalía pidió esa condena en 2019.
Su letrada, Judy Clarke, dijo en su alegato que "no hay desacuerdo" en que fue Bowers quien disparó en la sinagoga.
Pero consideró que quizá no sea posible entender plenamente su "equivocada intención de querer impedir que una organización judía ayude a inmigrantes a establecerse en Estados Unidos".
"Su idea impensable, insensata e irracional era que matando judíos lograría su objetivo", declaró Clarke, según el diario The Washington Post.
Los alegatos son escuchados por los 12 miembros del jurado y el juicio probablemente se extenderá hasta julio.
El inculpado por la masacre "rastreó metódicamente la pista de las víctimas y disparó a muchas de ellas varias veces y a quemarropa", dijeron hoy los fiscales en los alegatos iniciales del juicio, según medios locales y la agencia de noticias AFP.
"Todos los judíos deben morir", gritaba durante ese ataque que elevó el temor a un brote de antisemitismo y neonazismo en Estados Unidos, males endémicos que aún persisten en un país que registra constantes casos de racismo.
La masacre ocurrió en plena celebración del Shabbat, día sagrado de descanso para los judíos.
Bowers, excamionero, estaba armado de un rifle semiautomático de asalto AR-15 y tres pistolas Glock, según la fiscalía.
Arrestado en el lugar, fue imputado de 63 cargos, entre ellos los de delito de odio con resultado de asesinato e intento de asesinato.
Miembros de tres congregaciones fueron muertos, mientras que dos fieles y varios policías resultaron heridos.
El proceso se inició en medio de un creciente número de incidentes antisemitas en Estados Unidos, según datos de la Liga Antidifamación.
Unos seis millones de judíos viven en Estados Unidos, según un estudio del centro Pew publicado en mayo de 2021.
Con información de Télam
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