Bielorrusia anunció hoy que prohibirá a partir del 1 de enero y a lo largo de seis meses las importaciones de alimentos de varios países occidentales en represalia a las nuevas sanciones impuestas por supuestamente incitar a una crisis migratoria en las fronteras de la Unión Europea (UE).
Según un decreto gubernamental, no podrán ser importados una serie de productos alimentarios como frutas, verduras, carne y productos lecheros de la UE, Canadá, Estados Unidos, Reino Unido y otros países europeos.
La semana pasada, Estados Unidos, Canadá y la UE ampliaron las sanciones para protestar contra la reciente crisis migratoria en las fronteras entre Bielorrusia y Polonia.
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Minsk es acusado de haber alentado a miles de inmigrantes de Medio Oriente a viajar ilegalmente a la frontera oriental del bloque europeo para desestabilizarla.
El presidente Alexandr Lukashenko, que recibe el apoyo de Rusia, niega las acusaciones.
"Se han tomado medidas de represalia teniendo en cuenta los continuos intentos de Occidente de ejercer colectivamente una presión ilegal con sanciones contra nuestro país", alegó el Ejecutivo en un comunicado.
Algunos productos, como los alimentos para bebés, no se verán afectados, según el Gobierno bielorruso, para no perjudicar los "intereses" de sus habitantes.
"Los importadores, fabricantes y distribuidores se esforzarán por sustituir los productos no producidos en Bielorrusia por mercancías procedentes de países amigos", dijeron las autoridades, citadas por la agencia de noticias AFP.
Desde la represión de las protestas de 2020 contra Lukashenko, los occidentales castigaron al país con sanciones contra empresas y responsables del régimen.
Desde 2014, la propia Rusia ha dejado de importar productos alimentarios occidentales en protesta por las sanciones occidentales tras la anexión de la península ucraniana de Crimea.
Con información de Télam
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