Un hombre de 31 años fue condenado a la pena de 12 años de prisión de cumplimiento efectivo por el intento de asesinato de su pareja, a quien roció con alcohol y prendió fuego porque le pidió que bajara el volumen de la música en la vivienda que compartían en la ciudad de Santa Fe, informaron hoy voceros judiciales.
Se trata de Facundo Daniel Rojas, a quien un tribunal integrado por los jueces Martín Torres, Cecilia Labanca y Celeste Minniti condenó a 12 años de prisión en el marco de un juicio abreviado.
Rojas admitió su responsabilidad en el ilícito y recibió la pena como autor del delito de tentativa de homicidio calificado por haber mediado una relación de pareja y por haber sido cometido por un hombre en perjuicio de una mujer mediando violencia de género (tentativa de femicidio).
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El ataque fue cometido en la madrugada del miércoles 20 de enero de 2021 en una vivienda ubicada en calle French y Pasaje Santa Fe, en el noroeste de la capital provincial, donde convivían el condenado y la víctima.
El fiscal Andrés Marchi, quien representó en el juicio al Ministerio Público de la Acusación (MPA), indicó que “Rojas intentó matar a su pareja a raíz de que ella le pidió que baje el volumen de la música que él estaba escuchando, porque no se podía dormir”.
El fiscal explicó que “el ataque se inscribió en un contexto de violencia de género que venía sufriendo la mujer desde hacía aproximadamente cuatro años, caracterizado por violencia física y psicológica”.
"La investigación que realizamos nos develó que ya había habido otros episodios violentos que no habían sido denunciados por la víctima por miedo”, añadió Marchi.
Además, sostuvo que “ante el pedido de la víctima Rojas la golpeó con sus puños y la pateó en distintas partes del cuerpo”, y luego "la roció con alcohol puro y le prendió fuego con un encendedor con el objetivo de quitarle la vida”.
“Con la intención de apagar el fuego en el cuerpo de la mujer, Rojas le arrojó orina que había en un balde”, amplió Marchi, que enfatizó que “la mujer gritaba pidiendo ayuda y diciendo que quería ir a un hospital, pero él no la dejaba salir de la casa”.
El fiscal contó que “la víctima pudo salir de la vivienda para solicitar ayuda, y su madre y otra mujer del entorno familiar la llevaron al hospital Iturraspe, donde recibió la primera atención médica y luego fue derivada al hospital Cullen”.
En ese sentido, concluyó que “gracias a las curaciones que le realizaron pudo salvar su vida", aunque "sufrió quemaduras que afectaron el 15% de su cuerpo”.
Con información de Télam
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