El aliado nacionalista del presidente Tayyip Erdogan dijo el martes que el líder encarcelado del grupo armado kurdo PKK podría ser autorizado a hablar en el Parlamento de Turquía, si anuncia el fin de la insurgencia del grupo, a cambio de la posibilidad de ser liberado.
Devlet Bahceli, líder del Partido del Movimiento Nacionalista (MHP), hizo la sorprendente sugerencia a los diputados del MHP en un discurso parlamentario tras las especulaciones de algunos medios de comunicación en las últimas semanas sobre nuevos esfuerzos para poner fin a un conflicto que comenzó hace 40 años.
Hizo la oferta a Abdulah Ocalan, fundador del proscrito Partido de los Trabajadores del Kurdistán (PKK), que desde 1999 cumple cadena perpetua agravada en una prisión insular al sur de Estambul, con escasas perspectivas de ser liberado.
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"Si se levanta el aislamiento del líder terrorista, que venga y hable", dijo Bahceli, que propuso que se dirigiera al partido prokurdo DEM en el Parlamento. "Que grite que el terrorismo ha terminado por completo y que la organización se ha disuelto".
Dijo que si Ocalan lo hacía, se le debería dar entonces el "derecho a la esperanza", sugiriendo que potencialmente podría ser puesto en libertad.
El llamamiento de Bahceli fue extraordinario, dado que sus discursos suelen estar llenos de hostiles contra Ocalan, el PKK y los políticos prokurdos de DEM a los que considera aliados del PKK.
El PKK inició una insurgencia separatista en 1984 y más de 40.000 personas han muerto en el conflicto. Turquía, Estados Unidos y la Unión Europea lo consideran un grupo terrorista.
El Estado turco mantuvo conversaciones de paz con Ocalan y el PKK desde 2012, pero ese proceso y un alto el fuego fracasaron en julio de 2015, desatando el periodo más sangriento del conflicto.
Bahceli dijo que no había necesidad de un nuevo proceso de paz, afirmando que el PKK debía entregarse incondicionalmente a la justicia turca y cumplir penas de prisión. Sin embargo, sí propuso la aplicación de reformas democráticas no especificadas.
Las especulaciones sobre posibles medidas al respecto se dispararon cuando el Parlamento reabrió sus puertas el 1 de octubre tras el receso estival y Bahceli adoptó la rara medida de estrechar la mano de los diputados del DEM, normalmente el blanco de su dura retórica.
Tras la llamada de Bahceli, el colíder de DEM, Tulay Hatimogullari, dijo a los diputados del partido en un discurso que estaban dispuestos a poner de su parte por "una paz honorable".
"Acabemos con el aislamiento de Ocalan y que salga a hablar. Entonces podremos escuchar lo que tiene que decir", dijo Hatimogullari en el Parlamento.
DEM afirma que a Ocalan no se le ha permitido reunirse con sus abogados ni con su familia durante 43 meses.
Con información de Reuters
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